Noche de estatuillas y modelitos
En la ceremonia de los Oscar, todos los años hay dos jurados: el de cine y el de moda
LOS miembros de la Academia ya han decidido qué películas y actores serán los grandes ganadores de los Oscar que se entregarán el domingo en Hollywood. Pero esa misma noche, y a medida que las actrices desfilen sobre la alfombra roja, se tomará la decisión final sobre quiénes son las estrellas mejor vestidas. En este caso, el jurado son los televidentes en todo el mundo y los periodistas que en directo van emitiendo sus comentarios. La blogosfera también mostrará al instante vestuarios y looks. Mientras los organizadores de la 82ª edición de estos galardones prometen una renovación de la ceremonia y afirman que los espectadores "nunca han visto unos Oscar como éstos", los diseñadores top dan las últimas puntadas sobre sus maniquíes de carne y hueso: las actrices. Quieren dar un golpe de efecto que esté en sintonía con estos aires de renovación del megaespectáculo del cine y la moda. En el caso de Penélope Cruz, nominada como actriz secundaria por Nine, las buenas lenguas apuestan a que el obsesivo responsable de su look será el alemán Karl Lagerfeld para Chanel. Ya hubo medios que consagraron a Pe como la actriz mejor vestida los últimos años en la alfombra roja, e incluso Entertainment Weekly consideró que es la mejor de las últimas dos décadas. Según las elecciones de vestuario que viene haciendo, todo indica que su fetiche es el vestido strapless de marcas de alta costura. El año pasado, Pe lució un traje Pierre Balmain vintage: un vestido blanco strapless, bordado en pedrería y con una falda soberbia. En 2008, se lució con otro strapless negro de Chanel Couture, de faja y un escote salpicado de tules cual plumas, mientras en 2007 se encumbró como esencia de la elegancia con un diseño de Versace hecho con chifón de seda, organza y tul rosados. Sandra Bullock, nominada como mejor actriz, también ha tenido muchas oportunidades de lucirse, pero con menos suerte. Su estilo libre y gracioso no siempre coincide con su vestuario, aunque sí su coraje: hace cuatro años, en la alfombra roja lució un vestido negro y azul strapless, cuya falda monárquica ¡incluyó bolsillos! Un lugar que aprovechó para esconder sus manos al posar ante las cámaras. Más elegante fue en la edición de hace seis años, cuando eligió un vestido de la colección otoño-invierno 2004 de Oscar de la Renta: un diseño de seda blanca decorado con plumas, pero lejos del impacto estridente que causó Björk con su traje de plumas en 2001.
Los hombres La osadía total corrió por cuenta de Mickey Rourke en 2009, cuando en su regreso a los Oscar vistió un informal traje blanco de botones y chaleco negro, con zapatos negros y camisa blanca. Todo con anteojos oscuros y un rostro remodelado por la cirugía y cabello largo hacia atrás. Hace dos años Morgan Freeman, ahora nominado como mejor actor, sorprendió con un look en el que redefinió el smoking con una brillante camisa blanca y un pañuelo negro satinado anudado al cuello. Trató de rejuvenecer aún más su look con una barba candado y un pendiente en el lóbulo izquierdo. Pero lo suyo no fue un arranque súbito de vanguardia: hace cinco años lució un smoking de rayas verticales con camisa negra y cuello abierto. Por lo general, los invitados masculinos se ciñen al smoking negro de tres piezas y pajarita que pauta la etiqueta, con diferencias muy sutiles como modelos de dos o tres botones y telas más o menos brillantes con diversas intensidades de negro. Los cuellos también son un área para marcar diferencia: con o sin moño, algunos incluso con corbata y en la nueva tendencia: nada, un botón de la camisa abierto. George Clooney es el actor más respetuoso con la etiqueta, pero infiel con las marcas: alguna vez ha dicho que le da igual usar Gucci o Armani. En los últimos años ha lucido smokings discretos de dos botones, a lo sumo con bordes satinados, y pajarita. Como mucho se destaca con los gemelos para los puños y un reloj plateado de gran tamaño.
Pero no sólo las nominadas marcarán tendencia. Las presentadoras de los premios también tendrán oportunidades, incluso a veces disponen de más tiempo en pantalla. Por primera vez desde que se entregan los Oscar, nueve diseñadores compiten para que sus creaciones vistan a una de las presentadoras. Además, quien gane el certamen de moda para las estrellas tendrá el premio adicional de ser invitado al evento Desafío del Diseñador del Oscar: detrás del vestido. La coordinadora de moda de los Oscar, Patty Fox, ha anticipado que los diseñadores "han hecho vestidos con siluetas muy poco marcadas, creo que entendieron qué es lo que tiene que llevar una estrella para destacar en la alfombra roja" e hizo hincapié en que un rasgo coincidente en los vestidos es que tienen "un solo hombro", cristales Swarovski sobre sedas y colores pasteles, además del tradicional blanco y negro.