En estas fechas, millones de personas en todo el mundo recorren alocadas los centros comerciales buscando qué regalar a sus seres queridos, pero en Estados Unidos los regalos que están de moda no se encuentran en las tiendas: se trata de artículos personalizados que van más allá de la típica taza con la foto del nieto y que incluyen desde joyas diseñadas a imágenes del propio ADN, todo ello a la venta en internet.

La necesidad de encontrar obsequios que sean económicos y originales a la vez ha convertido los regalos personalizados en los favoritos de estas navidades en EE.UU., y las compañías que ofrecen estos productos están haciendo su agosto en pleno diciembre.

Mientras las ventas on line en aquel país sólo han crecido un 4% estas fiestas, según comScore, páginas de internet como Zazzle, CafePress y Scrapblog, donde los usuarios pueden crear artículos personalizados como calendarios, camisetas o libretas con fotos propias, han vendido un 80% más que el pasado año. La facturación de Spreadshirt, un sitio para diseñar tus propios bolsos, paraguas o incluso ropa interior, se ha doblado, mientras que las ventas de Blurb, que encuaderna fotos personales en artísticos libros, han subido un 43%.

El común denominador es que estos productos suelen ser baratos y permiten hacer las compras desde casa, a golpe de ratón y tarjeta de crédito. Este año, uno de los obsequios más populares son las videocámaras Flip, que pueden personalizarse en CafePress con fotos, por ejemplo, de la saga cinematográfica Crepúsculo.

Blue Nile, firma estadounidense que empezó a ofrecer el pasado año joyas personalizadas, ha registrado esta Navidad un incremento del 20% en los pedidos. Utiliza un sofisticado software para permitir a los usuarios confeccionar su propios anillos, pulseras o collares eligiendo entre decenas de opciones y materiales. Una vez diseñada, el cliente recibe la joya en su casa. Los precios son menores que los de las joyerías porque Blue Nile no tiene puntos de venta.

Zazzle, una de las compañías veteranas del sector, ha invertido tres años de trabajo en el desarrollo de diferentes tipos de tinta para imprimir imágenes en los más diversos materiales. Entre sus productos más exitosos están las zapatillas Keds con imágenes impresas a gusto del consumidor, o los sellos de correos con fotos apropiadas para cada ocasión.

Pero, puestos a personalizar, ¿qué hay más personal que el ADN? La canadiense DNA 11 ofrece desde hace ya varios años imágenes del ADN o huellas dactilares convertidas en obras de arte por entre 200 y 1.000 dólares. El procedimiento es sencillo: DNA 11 le envía al cliente un kit para recoger fácilmente una muestra del ADN de la boca, y éste lo manda de vuelta. Allí será analizado y sus técnicos crearán artísticas imágenes de la cadena de ADN para colgar en las paredes de casa.

Las ventas se han disparado este año. "En un mundo en el que todo está estandarizado, la gente quiere diferenciarse del resto", dijo Adrian Salamunovic, cofundador de DNA 11. "Es el regalo perfecto para alguien que ya lo tiene todo. Nuestros cuadros son, por ejemplo, un perfecto regalo familiar", explica. "Muestran el ADN de dos personas, ideales para simbolizar la unión entre marido y mujer".