El trasplante de médula ósea ha mantenido su actividad hasta alcanzar un total de 3.375 el pasado año lo que supone solo un 2 % menos que en 2019 a pesar de la pandemia del coronavirus, que tampoco ha impedido que se siga reduciendo la media de tiempo para localizar a los donantes y sea de 26 días.

Es el balance de datos de 2020 que ha hecho público este miércoles la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) sobre el programa de médula ósea y del que informa el Ministerio de Sanidad en una nota de prensa, en la que destaca que los datos son "una muestra más de la fortaleza" de esta iniciativa.

En concreto, el pasado año se realizaron un total de 3.375 trasplantes de progenitores hematopoyéticos -o células madre de la sangre-, obtenidos de médula ósea, sangre periférica y sangre de cordón umbilical, de los que 2.049 procedían del propio paciente -trasplantes autólogos- y 1.326, de un donante -trasplantes alogénicos-.

ESFUERZO DE LOS SANITARIOS

Estos datos muestran que solo se realizaron 69 trasplantes menos que en 2019, lo que representa un 2% de reducción, a pesar de que el año ha estado marcado por la pandemia de la covid.

Y la actividad de trasplantes de progenitores hematopoyéticos ha aumentado un 33 % en la última década, con un 53% de incremento en los trasplantes alogénicos y un 15 % en los de donante no emparentado.

De esta forma, la ONT subraya que ha conseguido mantener la actividad "gracias al gran esfuerzo" de los sanitarios, de los centros implicados, de los protocolos establecidos por la ONT, de las comunidades y de la Fundación Josep Carreras, que gestiona el Registro Español de Donantes de Médula Ósea (REDMO) desde 1994.

TIEMPO DE BÚSQUEDA DE DONANTES

Además, en 2020 solo se tardaron 26 días de media en localizar al donante de progenitores hematopoyéticos idóneo para cada paciente, mientras que diez años antes, en 2010, se empleaban 48, con lo que el tiempo medio para localizar donante se ha reducido a la mitad en la última década.

Se activaron 920 nuevas búsquedas de donante no emparentado para pacientes españoles y se localizaron 1.460 donantes compatibles para 786 pacientes, lo que supone prácticamente dos donantes por paciente.

Según la ONT, España cuenta con 64.638 unidades de sangre de cordón umbilical (SCU), lo que supone un 8 % de las almacenadas en el mundo (799.770), y lo sitúa como el mayor registro de Europa y el tercero en el mundo, detrás de Estados Unidos y Taiwán.

El pasado año se enviaron 115 unidades de SCU para trasplante, 17 para pacientes nacionales y 98, para extranjeros; y en los 23 casos de trasplante no familiar que se realizaron se empleó SCU de donantes de bancos públicos.

RED INTERNACIONAL DE REGISTRO

A finales de 2020, España contaba con 431.703 donantes inscritos en el REDMO, gracias a los cuales 220 donaciones fueron efectivas frente a 221 en 2019.

Además, durante el pasado año se incorporaron 30.631 nuevos donantes al registro, cuya media de edad era de 29 años, en tanto que la del total de los inscritos era de 33.

De esta forma, el 53 % de los donantes disponibles es menor de 40 años.

El REDMO forma parte de una red internacional de registros que permite localizar, en el menor tiempo posible, el donante óptimo para cada paciente, aunque, por logística, siempre se intenta priorizar los donantes nacionales.

POR PAÍSES

España se mantiene en el quinto puesto del ránking europeo en donantes de médula ósea registrados, por detrás de Alemania, Polonia, Reino Unido e Italia. El país recibió progenitores hematopoyéticos de países tan lejanos como Argentina o Australia y también envió a otros como Chile o Nueva Zelanda.

El Plan Nacional de Médula Ósea se puso en marcha en 2013.