LA vida es como un cóctel, a veces dulce y otras amarga. Lo importante es encontrar esos elementos con los que poder disfrutarla al máximo, sin prisas... La clave es buscar la armonía entre los ingredientes. Si hay alguien que sabe de sabores y de mezclas para crear combinados que quitan el hipo es Fran Ceacero. El presidente de la asociación de barman de Bizkaia es un apasionado de este mundo y ha puesto en marcha en Bilbao el primer bar escuela de cócteles de Euskadi. Ha tomado el nombre de la ginebra Gin Fizz -un clásico en los años 70 en Bilbao- para bautizar un espacio que pretende ser referente en el mundo de la coctelería.

Detrás de la barra se asoman una veintena de mezclas, frutas y tés... con los que los profesionales consigan esos cócteles que se acopla n a los gustos de los clientes. Rones, vodkas, whisky, brandis... “Lo que queremos es que la gente pruebe esos cócteles elaborados con destilados saborizados, como puede ser un brandy efusionado con frutas y especias. Hay que dar un paso y encontrar esos sabores diferentes que nos gustan”, apunta Ceacero.

La escuela funciona los lunes y martes durante todo el día. Y los miércoles y jueves por la mañana. Fran ha reformado el local, situado en la calle Lersundi para, además de convertirlo en un establecimiento acogedor donde disfrutar de un buen cóctel, impartir los cursos para profesionales con formación teórica-práctica y con su diploma acreditativo. “La idea es organizar también catas y talleres para el público, amantes de la coctelería”, añade Fran.

Alexander Ruiz, Juan Fernando, Erika Peñaralda, Juan Luis Rodríguez y Mari Jose Soto, hosteleros profesionales ya han realizado uno de los cursos en el Gin Fizz. Todos coinciden: “Nos hemos enganchado a la pasión por el mundo de la coctelería”. A Juan Fernando y Jose Luis descubrir el amplio abanico que existe en el sector de la coctelería les ha ayudado de revulsivo para darle una vuelta a su profesión. Para Álex poder contar con una escuela de coctelería en Bilbao es una gran “oportunidad para ampliar conocimientos” en este sector que cada vez cuenta con más adeptos. “Lo importante es coger una buena base. Antes para hacer un curso de coctelería teníamos que ir a Madrid o Barcelona”, añade. Mari Jose Soto, del bar Txomin de Mungia lleva toda la vida trabajando en la hostelería pero el mundo de los cócteles le apasiona. “Para mí ha sido una suerte descubrir a Fran. Cuando me enteré de que iba a abrir la escuela no me lo pensé dos veces. He aprendido muchísimo y me ha inyectado una gran pasión. Tengo ganas de estar aprendiendo todo el día”, destacó Soto. Para Erica también ha sido un descubrimiento y una gran oportunidad profesional poder realizar este curso. “No solo por todos los conocimientos que me ha aportado Fran sino que además para mí ha sido un lujo poder conocer a quienes han participado en este curso, verdaderos profesionales”.

Lo cierto es que en Bilbao ha existido históricamente una tradición de cócteles. Una realidad que, en opinión de Taiche Puig, creador de Radical Bartending School, en 2003 en Gran Canaria, va a ser fundamental para lograr los objetivos marcados. “En Bilbao hay potencial. Nosotros hemos confiado en Fran para crear una idea que nosotros llevamos desarrollando desde hace 16 años”, concluyó Puig.