cONOCIDA como el oro blanco de Leintz Gatzaga, el papel de la sal en la historia de la localidad guipuzcoana ha sido tan importante que incluso se incorporó a su nombre. El domingo celebrará su Gatzaren Eguna, un día en el que se podrá disfrutar de un amplio programa de actos, de los culinarios a los lúdicos y deportivos. Además se podrá visitar el popular Museo de la Sal.

El frontón acogerá los actos principales del Día de la Sal del pueblo. La actividad en torno a su manantial salino constituyó durante siglos “la sal de la vida” de la villa, propició su nacimiento, e, incluso, le dio nombre. El frío y húmedo clima no favoreció que la explotación se realizara por evaporación solar, sino por un minucioso proceso de calentamiento del agua con fuego de leña.

El conocido como oro blanco, al que se le reconocen más de 14.000 aplicaciones directas o indirectas, además de su papel como bien económico dadas sus propiedades nutricionales y para la conservación de alimentos, vivirá el domingo su día grande con múltiples actividades, como una feria centrada en la sal y productos ecológicos en la que participarán, desde las 11.00 horas, productores de la comarca de Debagoiena y municipios cercanos, así como otros llegados de Araba, Nafarroa y Burgos.

El frontón también acogerá una feria de productos artesanos hasta las 14.30 horas. Antes, a las 10.00, tendrá lugar un itinerario a cargo de Jakoba Errekondo, experto en geología de la EHU-UPV. Será una visita en euskera, para adultos, bajo el título de El paisaje de la sal, una mirada en la superficie y bajo tierra. Hay que inscribirse en el teléfono 943796463.

Por la mañana, igualmente, tendrán lugar una pisada de manzanas para elaborar sidra; un taller de fermentos en el que se explicarán técnicas para la conservación de vegetales con salmuera; y juegos populares realizados con madera. El Ga-tzaren Eguna concluirá por la tarde con un concierto de rumbas en euskera a cargo de Kilimak, a las 17.00 horas.

museo de la sal El programa de esta festividad incluye la realización de visitas al Museo de la Sal de la localidad, que se levanta en las instalaciones utilizadas durante siglos para la producción, a escasos 250 metros del casco urbano y de camino hacia el santuario de Dorleta. Las visitas tendrán lugar a las 11.00, 12.00 y 13.00 horas del domingo y, según se anuncia, ofrecerán “un mundo de sentidos abierto a todos los que quieran catar, oler, oír y saborear”.