bilbao - Es un hombre de radio, pero al que le encantan los retos y, por ello, hoy va a estar en El conquis. Lleva casi tres décadas apostando por una emisora que nació como experimento y que se ha convertido en la tercera en audiencia tras la SER País Vasco y Radio Euskadi. Jóvenes y no tan jóvenes se conectan a diario a Gaztea para meterse en un universo musical que no deja de lado el entretenimiento.

Le hacía a usted un hombre radio.

-Ya, ya, lo que son las cosas. Llevo 27 años haciendo radio, este año los cumplo en Gaztea, que ya no sé lo que tengo yo de gaztea, pero bueno. En este tiempo también me ha tocado hacer cosas en la tele.

¿Qué tipo de cosas?

-Normalmente musicales, tocar conciertos, hacer programas de vídeoclips; incluso talent shows. Sí, he hecho cosas para la tele, pero no del carácter de lo que me va a tocar hacer en El conquis.

Perdone que insista, pero usted no me pegaba nada en el universo de ‘El conquistador del Fin del Mundo’.

-La radio va cambiando, las radios musicales no son exclusivamente musicales. Se hacen, igual que antes, para la gente joven, pero haciendo un guiño a gente que tiene una edad. ¿Qué es hoy en día la juventud?

¿En qué ha cambiado Gaztea?

-Llega un poco a todos los públicos, no solo presentamos música en la radio; también hacemos magazines y metemos otro tipo de contenidos. Nos dedicamos más al entretenimiento. Es más, a mí desde la dirección estos últimos años se me ha direccionado más a lo que es el entretenimiento que a la música.

¿Era seguidor de ‘El conquistador’ o de ‘El conquis’?

-Hasta ahora no, porque estaba en el turno de mañana en la radio, entraba a las seis o seis y algo de la mañana, tenía que madrugar. Pero este curso lo voy a poder hacer en el plató.

¿Cuál es su papel en este debate de los miércoles?

-Voy a unir la radio y la televisión; voy a hablar sobre los concursantes, estaré allí con sus familias y amigos, pero también voy a poner música para acompañar lo que es la fiesta del debate.

La radio ha cambiado mucho, lo dice usted mismo, pero ¿siguen los jóvenes pegados al modelo de la radio fórmula?

-La radio que empezamos a hacer nosotros en 1990 no es la que estamos haciendo este 2017.

¿Han cambiado las prioridades?

-La música es muy importante, tiene un tanto por ciento muy alto, pero hay que dar más cosas. En ese tipo de cosas cabe el humor, la información, concursos, participación de la gente y mil cosas; la música también, por supuesto. Hemos ampliado el campo. Es cierto también que la gente joven no tiene el apego que tuvimos nosotros en su día a la radio.

Tienen otros elementos.

-Internet se lo está comiendo todo, no solo la radio, también la tele. La radio sigue siendo una compañía muy importante tanto para la gente que tiene muchos años, como para la gente joven.

Supongo que usted sí es de los fieles a la radio.

-Cuando salgo de viaje, si es corto y en coche, puedo llevar un CD y escuchar música y lo que sea. Si el viaje es largo, siempre me gusta tener la compañía de alguien, que alguien me hable, sentir a alguien cerca... En ese sentido, la radio se ha tenido que hacer a los tiempos nuevos pero a su vez sirve de compañía, cubre esa necesidad que tenemos todos los humanos.

¿Es un reto ‘El conquis’? ¿Lo ve difícil?

-Pues sí, todo es un reto en mi vida. La primera vez que escuché mi propia voz en la radio, buff, no me reconocí en ella, pero después de mucho tiempo he acabado asimilándola. Si lo de la voz es un golpe para una persona, imagínate lo que es verse delante de una cámara.

¿Le impresiona?

-Ja, ja, ja... Todos nos miramos al espejo, pero yo no soy de esas personas que se miran y se están hablando.

¿Qué hace usted ante el espejo?

-Me miro, veo si estoy bien vestido, si he combinado bien, estoy guapo, hoy no me veo guapo, me tengo que afeitar o qué se yo. Hay gente que se trabaja delante del espejo, yo no. La primera vez que te ves en una pantalla dices: Ese elemento que estoy viendo delante de mí, ese elemento no soy yo. No puedo ser yo.

¿El idioma es también un elemento extraño?

-Pues sí. Supone otro reto para mí, por el hecho de tener que hacer las presentaciones en castellano. En estos 27 años, prácticamente toda mi carrera la he hecho en euskera. He realizado alguna cosa en castellano, pero no es mi lengua materna, no es en la que normalmente yo me comunico, aunque es una lengua que conozco, la tengo aquí al lado y con la que comparto muchas cosas. Vamos a ver qué pasa.

Gaztea en 1990 era un experimento, ahora es una realidad exitosa con mucha audiencia.

-Es una maravilla. Arrancamos como un experimento; empezamos con un contrato de seis meses y aquí continuamos.

Y han pasado 27 años.

-Tampoco se sabía cuánto iba a durar, esos seis meses pasaron a un año, dos, tres... y 27. En este tiempo, hemos llegado a ser la radio joven número 1 de Euskadi, haciendo una programación, no en exclusiva, pero sí en un 99,99% en euskera, tratando de pescar donde más peces hay y tratando de hacer una radio que le diga algo a la gente joven y a los que ya no tienen esa juventud tan cerca...