La Policía Nacional ha detenido a tres personas en Getxo por contratar de manera continuada a trabajadoras de un bar de Getxo para explotarlas laboralmente. Los arrestados el dueño del local, de 61 años, su pareja de 40 años, y la encargada del local, de 31 años.
Todo comenzó cuando seis mujeres declararon en la Comisaría General de Extranjería y Fronteras que se encontraban trabajando en un bar de Getxo a pesar de carecer de permiso de residencia de trabajo. Tras estas declaraciones, comenzaron a investigar y descubrieron que los delitos que se llevaban a cabo dentro del local iban más allá de la contratación irregular.
Un trato irreal
Las mujeres explicaron a los investigadores que el dueño del establecimiento, su esposa y una encargada les hacían las entrevistas de trabajo y controlaba sus horarios y desempeño, ofreciéndoles trabajar seis días a la semana, diez horas al día, a cambio 1.000 euros al mes. Sin embargo, lo que se encontraban no tenía nada que ver con lo acordado.
No podían descansar durante su jornada laboral, tenían que trabajar aunque estuviesen enfermas, su salario era de 20 euros al día, lo que suponía un sueldo mensual de 600 a 800 euros. Todo ello sin que les hicieran contrato de trabajo y, por tanto, dieran de alta en la Seguridad Social.
Además, señalaron que el dueño de local llegó a detraer parte del sueldo de una de las víctimas para pagar una sanción impuesta por la Inspección de Trabajo de Bizkaia.
Tocamientos y azotes durante la jornada laboral
A eso, se sumaba que el dueño del local es hacía continuos tocamientos, como pellizcos y azotes mientras trabajaban, así como ofrecimientos sexuales a cambio de ayudarlas a traer a sus familiares o de dejarlas dormir en un local que el sospechoso tiene en Getxo.
Ante la verosimilitud y coherencia de las declaraciones y la gravedad de los hechos narrados, los agentes les confirieron inmediatamente el estatus de testigos protegidos e iniciaron una rápida investigación que permitió corroborar las versiones dadas, determinando que los tres investigados llevaban contratando a trabajadoras en situación irregular desde el año 2018.
Por todo ello, agentes de la Brigada de Extranjería y Fronteras junto con miembros de la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Bizkaia realizaron una inspección en el bar, procediendo a la detención de los tres sospechosos.