La preocupación en Basauri es máxima después de que "al menos" cinco perros hayan muerto en los últimos días tras haber comido, presuntamente, comida envenenada por la calle. Según han detallado desde la Asociación Provida Animal-Aprova, las zonas en las que se ha colocado el supuesto veneno habrían sido en Bizkotxalde y detrás del campo de fútbol de la calle Soloarte. Sin embargo, desde el Ayuntamiento señalan que no consta en la Policía Municipal ninguna denuncia formal.
"Esto pasa reiteradamente y nos obliga a no soltar en ningún momento a los perros", denuncian. "Por la gravedad de los hechos el Ayuntamiento debería poner un bando advirtiendo de este peligro e informando al envenenador o envenenadora del delito que está cometiendo y a las penas de cárcel que se podría enfrentarse", indican desde Aprova.
Y es que, el delito por uso de veneno o de cebo envenenado contempla una pena máxima de hasta dos años de prisión. Cabe resaltar que se trata de un delito de mera actividad y no de resultado. Esto quiere decir que el mero hecho de dejar comida envenenada ya es un acto ilícito sancionable, aunque no haya intoxicación de ningún animal afectado.
El temor a que les pase algo a sus mascotas ha invadido a muchos de los vecinos de Basauri. "No veo muy bien, así que cuando salgo a pasear me tengo que poner la gafas que utilizo para leer para evitar que el perro se acerque a lo que puede ser comida envenenada", lamenta uno de los basauritarras al que la situación le quita el sueño.
Sin denuncias por lo sucedido
Desde el Ayuntamiento de Basauri señalan que no consta ningún tipo de denuncia ni de información veterinaria de un posible caso de envenenamiento. "Desde el Ayuntamiento vamos a hacer un seguimiento de los partes policiales que nos puedan trasladar así como de los posibles informes veterinarios, ya que el motivo de una muerte puede ser por múltiples factores y solo un especialista puede confirmar la razón de la misma", han indicado.
Por ello, el Consistorio se encuentra coordinado con la Policía Municipal para que en caso de que los agentes vieran "alguna situación extraña o sospechosa", trasladasen la información "para analizar si está pasando algo e intentar proceder de la mejor manera si así fuera".
Desde los hospitales veterinarios consultados por este periódico han señalado que esta información sobre la causa del fallecimiento de los perros, por protección de datos, no se puede facilitar. Sin embargo desde la Aprova cuentan que sospechan de que el veneno utilizado haya podido ser 'matarratas' ya que "una de las perras presentaba hemorragias por la boca y el ano".
A la espera de que los posibles responsables de estos presuntos envenenamientos sean localizados, el vecindario paseará con sus mascotas con más prudencia aún de la que lo hacen habitualmente, evitando soltarles la correa para evitar que estos enfermen.