Rompen el escaparate para robar en un supermercado

Bilbao - El Supermercado La Kompra, situado en la bilbaina calle Colón de Larreátegui, amaneció ayer con la luna del escaparate y un expositor de productos rotos. Los cacos -todavía se desconoce quiénes son los responsables y cuántas personas actuaron en el robo- destrozaron las cristaleras con el fin de adentrarse en el interior de la tienda. Una vez dentro, se hicieron con la caja registradora y, después de vaciarla, la tiraron al suelo.

El robo en la tienda, ubicado en la esquina con la calle Máximo Aguirre, se produjo alrededor de las 2.00 horas de ayer, según informaron fuentes del departamento de Seguridad del Gobierno vasco. A esa hora varios desconocidos, todavía sin identificar, rompieron el cristal y uno de los expositores de productos, y consiguieron abrir la caja registradora, en la que había 400 euros. El propietario del local no se percató de lo ocurrido hasta las 9.30 horas, media hora antes de la apertura. Fue entonces cuando agentes de la Er-tzaintza recibieron el aviso del robo.

“Hoy -por ayer- nadie habla de otra cosa. Todos los clientes que vienen a mi tienda están sorprendidos”, explicó el propietario de otro local cercano al lugar de los hechos. “Esta calle y las colindantes están de racha y se están convirtiendo en el blanco de la diana de los ladrones. Hace unos meses robaron en una farmacia, poco antes en dos tiendas... El día menos pensado me robarán a mí”, se lamentaba. Sin embargo, él nunca deja nada en la tienda, por sus experiencias anteriores. “Me robaron en mi casa. Entraron y se llevaron dinero. Es como una violación, no respetan nada. Violan tu intimidad, te quitan lo que es tuyo y desaparecen”, explicó, visiblemente indignado.

La propietaria de otro negocio ubicado en la misma calle también compartía su opinión. “Los que entran a robar saben hacerlo muy bien. Apenas meten ruido, tanto es así que prácticamente nadie se ha enterado del robo en La Kompra”, explicaba.

Tras el robo, la Ertzaintza abrió una investigación para dar con el presunto autor de los hechos. Los agentes de la unidad de investigación de la Policía Científica de la Policía Vasca realizaron ayer una inspección ocular.

“Siempre son los mismos. Entran a los establecimientos, en treinta segundos rompen el escaparate, cogen el dinero y se marchan. Nadie les oye, nadie les ve. Nos sentimos inseguros así, no estamos tranquilos ni con la alarma”, aseguraban los dos propietarios.

Muchos de los vecinos tampoco se percataron de lo ocurrido hasta la mañana. “Vivo justo al lado de la tienda y no me he enterado de nada”, aseguró una mujer. “Son silenciosos. Van despacio, pero poco a poco toca a todo el mundo”, concluyó.