Durango - La Asociación de Familias con Necesidades Especiales, Geu Be, denunció ayer el trato recibido por un alumno con parálisis cerebral, al ser éste "atado" y "dejado solo" por un profesor en una de las aulas del Instituto Fray Juan de Zumarraga de Durango.
Según dio a conocer la agrupación, aunque los hechos ocurrieron durante la primera semana del curso, en el pasado mes de septiembre, no ha sido hasta ahora, precisamente cuando el docente ha vuelto al centro educativo tras cumplir con la sanción impuesta por su conducta, cuando ha querido hacer público el suceso, y lo hace con el objetivo de que no vuelva a producirse una situación de este tipo. "Hay muchos pasos que se han dado de forma correcta, y queremos dar las gracias por todas las cosas que se han hecho bien, pero también hay puntos negros que queremos señalar para que no vuelvan a suceder", indicaron.
En palabras de Geu Be, el episodio tuvo lugar a raíz de una "crisis de comportamiento" sufrida por el alumno afectado. Fue entonces cuando el profesor decidió, primero, sacar al joven al pasillo. Como éste se negaba, el docente optó por sentarle en su silla de ruedas y trasladarlo a una clase vacía. No obstante, y "ante la insistencia del alumno de volver a entrar en su aula, el profesor le ata a la silla y le vuelca para que no se pudiera escapar ni se hiciera daño", dejándole solo en un aula "vacía y a oscuras", mientras él volvía con el resto de alumnos que reciben educación especial en el centro, que en ese momento eran un total de cuatro. Además, desde la asociación subrayaron que no se trató de un hecho aislado, sino que la situación se repitió, al menos, "dos veces en una misma semana".
En lo que respecta al docente implicado, Geu Be informó que el profesor "justificó la medida adoptada por el reclamo de atención del resto de alumnos del aula, situación agravada por haberse reducido el número de especialistas en plantilla del centro", de modo que "se veía incapaz de estar en dos sitios a la vez".
Tan pronto como supieron lo ocurrido, la Asociación de Familias con Necesidades Especiales durangarra cursó la correspondiente denuncia por "actuación indebida" contra la integridad física y psíquica del discapacitado, al tiempo que desde el centro educativo se inició un expediente disciplinario contra el "infractor".
sanción Según subrayó Geu Be, la forma inicial de actuar, tanto de la dirección del Instituto como de la Inspección de Educación fue ejemplar en "eficacia" y en "rapidez", informando de lo ocurrido a los padres e iniciando los trámites oportunos.
En este sentido, desde el departamento de Educación del Gobierno Vasco, por su parte, indicaron a DEIA que, cuando tuvieron constancia de lo sucedido, se actuó "tal y como indica el protocolo en estos casos", abriendo un expediente sancionador al profesor y apartándole temporalmente de la actividad docente.
De hecho, fue el pasado 13 de febrero cuando el educador volvió al instituto, una vez cumplida la sanción, "sin tener conocimiento de ello ni el centro ni los padres del afectado". Sin embargo, su reincorporación no ha sido como profesor de estos alumnos, sino que "ha sido derivado a labores en la biblioteca del centro, mientras que se le ha renovado el contrato, hasta que acabe el curso académico, a la persona que entró en su lugar para hacerse cargo de estos estudiantes con necesidades especiales", señalaron desde Educación.
En consecuencia, Geu Be considera "satisfactoria" la solución adoptada, puesto que el "el objetivo principal, que es la separación física de las dos personas, está conseguido", y solicitan que cuando se cometa una actuación de este tipo sea "comunicada" y "abordada" de inmediato. - Leire Gómez