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Cómo evitar la resaca y qué hacer para sobrellevarla

Las fiestas traen consigo el alcohol, y muchas veces, una fiesta termina por arruinar el día siguiente. Por eso, es clave saber cómo evitar éstas situaciones

Cómo evitar la resaca y qué hacer para sobrellevarlaE.P.

Salir de fiesta es sinónimo de diversión, pero también puede acabar con el temido malestar del día siguiente. La resaca es la respuesta del cuerpo al exceso de alcohol y se manifiesta con dolor de cabeza, sed intensa, fatiga, náuseas o sensibilidad a la luz y al ruido. Según la Organización Mundial de la Salud, el alcohol altera el equilibrio de líquidos, electrolitos y neurotransmisores, deshidrata y sobrecarga el hígado, lo que desencadena este cúmulo de síntomas.

Cómo prevenirla antes de salir

Aunque la única forma segura de evitar la resaca es no beber alcohol, si se decide hacerlo, conviene beber con moderación y a un ritmo que el cuerpo pueda asimilar. Beber despacio y alternar las copas con agua ayuda a que el hígado procese el alcohol más lentamente. Comer antes y durante la noche también es fundamental: alimentos ricos en proteínas y grasas saludables, como frutos secos, aguacate o pescado azul, ralentizan la absorción y protegen el estómago, creando una capa protectora que nuestro organismo agradecerá una vez el alcohol entre en su sistema. Evitar mezclas y bebidas muy azucaradas reduce la deshidratación, y beber uno o dos vasos de agua antes de acostarse puede marcar una gran diferencia al día siguiente.

Qué hacer cuando la resaca ya ha llegado

Si el malestar es inevitable, la prioridad es hidratarse para reponer líquidos y minerales perdidos. Agua, infusiones suaves o bebidas isotónicas ayudan a recuperar electrolitos. Un desayuno equilibrado también resulta beneficioso: frutas como el plátano aportan potasio, y los huevos, gracias a su contenido en cisteína, favorecen la metabolización del compuesto tóxico responsable de gran parte de los síntomas. De cara a una recuperación total, el descanso es esencial para que el organismo termine de procesar el alcohol y se recupere. Sin descanso, el cuerpo no tiene tiempo ni momento para volver a su estado habitual.

Un hombre bebe una bebida isotónica mientras practica deporte.

Alcoholes que suelen provocar resacas más suaves

No todos los tipos de alcohol tienen el mismo impacto en el cuerpo ni provocan resacas de igual intensidad. Las bebidas claras como el vodka, la ginebra o el vino blanco suelen generar síntomas más leves que licores oscuros como el whisky, el ron o el brandy. Esto se debe a que contienen menos congéneres, unas sustancias producidas durante la fermentación y destilación que, además del etanol, contribuyen al malestar posterior. Aunque la graduación y la cantidad siguen siendo determinantes, optar por bebidas con menos congéneres y consumirlas de forma moderada puede reducir la intensidad de la resaca. Aun así, la mejor estrategia siempre será combinar el consumo con agua y evitar las mezclas de alcohol.

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No todos los excesos alcohólicos provocan el mismo tipo de resaca. Beber licores oscuros ricos en congéneres, no hidratarse ni comer durante la noche multiplica el malestar y mezclar alcohol con bebidas energéticas enmascara la sensación de embriaguez, favoreciendo un consumo mayor y provocando un "maltrato" aún mayor a nuestro organismo. En definitiva, prevenir la resaca pasa por moderar el consumo y cuidar el cuerpo antes, durante y después de la fiesta para que el día siguiente no se convierta en un suplicio. La recomendación, evidentemente, pasa por no beber, peor en caso de hacerlo, es importante hacerlo con responsabilidad y sabiendo qué estamos metiendo a nuestro cuerpo.