Síguenos en redes sociales:

Dra. Aintzane PueyoNutricionista del Hospital Quirónsalud Vitoria

Navidad y comidas copiosas

El ámbito psicológico es una de las claves de la alimentación saludable

Navidad y comidas copiosas

Las navidades y las fiestas de fin de año son un momento de excesos y descuidos en la calidad de vida. Por eso mismo, hay muchas personas que intentan poner límites y restricciones en su alimentación, pero ¿hasta qué punto estos cambios en la dieta son beneficiosos?

 

Ayuno intermitente: ¿cómo beneficia esta práctica a quien la lleva a cabo? ¿o en estas fechas no es recomendable?

Según estudios recientes la práctica del ayuno intermitente nos puede llevar a conseguir beneficios como la reducción de la inflamación, pérdida de peso, recuperación de la energía y la mejora de la salud tanto digestiva como cardiovascular entre muchas otras más. Pero por muy maravillosa que parezca su práctica, realmente no es una estrategia en la que comenzaría a trabajar en estas fechas. Ya que si no estamos familiarizados con ella puede tener más efectos negativos que positivos.

Lo necesario para poder comenzar a practicar el ayuno intermitente es trabajar en una relación saludable y consciente con la comida (algo que a la mayoría de las personas les cuesta en esta época del año). Con lo cual, si no partimos de esa base lo más seguro es que nos quedemos bastante lejos de nuestro objetivo o incluso que empeoremos nuestra relación con la comida (miedos, ansiedades, atracones…).

 

De manera similar, ¿muchas restricciones previas o posteriores a la comida navideña son positivas o pueden hacer “efecto rebote” por ansiedad hacia la comida?

El tema de las restricciones es algo que puede dar para largo. En mi opinión, este tipo de actos nos alejan de unos hábitos alimentarios saludables. Mi objetivo en las consultas es trabajar en lograr una buena relación con la comida, si nos marcamos prohibiciones, esto será muy difícil de conseguir.

La clave está en entender la alimentación saludable como un concepto global y no aislar cada toma o alimento. Debemos crear un equilibrio en nuestros hábitos y para ello una buena idea puede ser el entender la alimentación como un 90-10. Es decir, el 90% de mi alimentación debe ser saludable, pero también hay un 10% en el que puedo optar por opciones menos saludables sin sentirme culpable.

 

¿Hay algún alimento que nos ayude a sentirnos tan pesados tras las comidas?

No, no hay ningún alimento mágico. Debemos ser conscientes de lo que comemos. Para ello, un truco que suelo recomendar mucho es la toma de conciencia, es decir, debemos ser consciente de lo que comemos y en que cantidades lo comemos.

Una buena recomendación es que antes de empezar a picotear hagamos una pequeña elección de alimentos que queremos tomar en esa comida/cena y la pongamos en el plato. De esta forma, estaremos visualizando lo que comeremos, nos saciaremos más y, sobre todo, seremos conscientes de las cantidades que podemos llegar a comer. Además, elegir agua como bebida principal también nos ayudará.

 

Si nos enfocamos en algo más psicológico, ¿cómo debemos enfrentarnos a las comidas navideñas?

El ámbito psicológico es una de las claves de la alimentación saludable. Lo fundamental es la toma de conciencia. Sabemos que son fechas en las que celebramos en torno a la comida y la bebida, pero esto no significa que toda la semana tenga que ser igual. Recomendaría que a lo largo del día/semana llevemos nuestra rutina alimentaria del día a día. Otra buena opción, es realizar una buena media mañana y/o merienda para evitar llegar con tanta hambre a esas comidas.

Mesa de Navidad

Después de las cenas/comidas navideñas, suele sobrar comida, ¿cómo se pueden compensar los excesos?

Lo ideal sería evitar llevárnoslo a casa, aunque muchas veces esta opción suele ser bastante complicada, por lo que yo intentaría ser realista con las raciones a la hora de cocinar. Y si realmente tenemos miedo de que nuestros invitados se queden con hambre… ¿Por qué no preparar raciones de verduras de acompañamiento? Son muy saludables y, además, muy saciantes si decidimos juntar la fibra que nos aporta con nuestro plato principal de proteína (carne, pescado, huevos, proteína de origen vegetal…).

 

¿Algún consejo para poner un poco el freno al alcohol durante las fiestas de Navidad?

Mi primera recomendación sería evitar beber alcohol durante estas fechas. Pero si tuviera que dar algún consejo os diría que en las comidas pongamos sobre nuestra mesa un vaso grande y una copa pequeña. El objetivo de esto es que llenemos el vaso grande hasta arriba de agua y la copa con una pequeña pizca de otro tipo de bebida que deseemos tomar. De esta forma, será mucho más llamativo el vaso de agua. Es más, os animo a llegar con la copa llena hasta el final de la comida para poder realizar ese brindis familiar.

  Por último, ¿cómo compaginar la Navidad y el deporte?

Las navidades son fechas en las que nos reunimos con la familia; y, la comida y la bebida son solo una excusa más para hacerlo. Seamos conscientes de lo que verdaderamente importa y disfrutemos más de los nuestros. Es muy importante no olvidarnos de mencionar la actividad física que debemos tener presente en nuestro día a día, ¿por qué no aprovechar para de un buen paseo en familia? De este modo podremos aprovechar para ejercitar nuestro cuerpo y no sentirnos tan pesados.