BOLSAS y ojeras son los principales enemigos de la estética en el rostro, y más concretamente en el contorno de los ojos, debido a que la piel de esta zona es la más frágil y sensible. Así lo atestiguan cifras como la del espesor medio de la dermis en esta parte de la cara, que es de entre 300 y 800 micras, esto es, cinco veces más fina que la del resto del rostro, que a su vez es cinco veces más delgada que la del cuerpo, según da a conocer la directora de Teringel Belleza, Cristina Marín. “En milímetros no llega a los 0,5 y además, tiene menos cantidad de fibras de colágeno, elastina y glándulas sebáceas”, detalla desde su profundo conocimiento en la materia tras una dilatada trayectoria al frente de este centro de estética. Asimismo, en el contorno ocular hay 22 músculos periorbitales que están en continuo movimiento, por lo que la piel del párpado inferior, amén de delicada, se distiende con facilidad.

OJERAS

Las ojeras son el oscurecimiento del área que rodea el párpado inferior por una disposición morfológica especial, que sumada a una piel tan fina deja ver la acumulación de sangre. Dan apariencia de cansancio y de tristeza en la mirada. Las personas de tez más oscura, al tener una mayor pigmentación, son más propensas a presentar ojeras que las de piel más clara. Además, no están directamente relacionadas con la edad, ya que en ocasiones se dejan ver en la infancia. En términos generales, las causas principales de su aparición son el factor hereditario, la carencia de hierro, pérdida de volumen de la grasa que hay alrededor de los ojos, falta de sueño y la edad. Las ojeras pueden ser marrones, azuladas o hundidas. Las marrones tienen hiperpigmentación de la piel bajo los ojos por la mayor producción de melanina en esta zona de la cara. Las azuladas se dan en personas dpiel más fina o pálida, en las que los vasos sanguíneos se hacen más visibles, originando esta variedad de color venoso. Por último, las ojeras hundidas son las que aparecen con surcos más profundos y dan aspecto de cansancio.

BOLSAS

En cuanto a las bolsas, son un abultamiento de la epidermis de debajo de los ojos debido a la pérdida de tono en el músculo y en la piel del párpado inferior, lo que produce un descolgamiento y adelgazamiento de la misma. Esta acumulación de líquido y grasa varía en cada persona y es la que define los distintos tipos de bolsa, según predomine uno u otro factor. Su aparición está relacionada con alergias o dermatitis, la edad, herencia genética, retención de líquidos y acumulación de grasa localizada.

SIN AGUJAS NI BISTURÍ

Para presumir de una mirada joven y resplandeciente, en Teringel Belleza eliminan bolsas y ojeras con tratamientos sin agujas ni bisturí, es decir, con soluciones estéticas sin cirugía. En una consulta previa, totalmente gratuita y sin compromiso, su equipo de profesionales hace el diagnóstico, ve de qué tipo de ojera y/o bolsa se trata y decide el tratamiento a realizar, siempre personalizado, por medio de diferentes tipos de láser, como explican desde este centro de estética ubicado en Barakaldo. Sus soluciones son aptas para cualquier edad y adaptadas a cada tipo de ojera o de bolsas bajo los ojos. Una cuestión muy importante de su tratamiento es, según destaca Cristina Marín, que “al no haber agujas ni bisturí, el ojo no cambia de forma”. Y además, “se puede hacer vida normal, puesto que no se produce inflamación ni rojeces o postillas”, subraya. El tratamiento contra bolsas y ojeras es demandado por buen número de hombres, en mayor proporción incluso que de mujeres. Para ellos, en Teringel disponen de “aparatología y productos específicos” subraya su directora.