El Mirador de la Memoria del valle extremeño del Jerte
Aunque ha pasado ya la época de floración, todavía se puede disfrutar de las cerezas en un bello espacio escultórico dedicado a los olvidados
Aunque ya se ha dado por concluida la floración de los cerezos esta primavera, la estampa que atrae a miles de turistas al extremeño Valle del Jerte, la zona todavía se puede disfrutar, ahora con más tranquilidad, para descubrir los pueblos del entorno, espacios como el Mirador de la Memoria y degustar las cerezas recolectadas.
El Valle del Jerte, Bien de Interés Cultural situado en el extremo nororiental de Extremadura y lindante al norte con las provincias de Ávila y Salamanca, está formado por 11 poblaciones, entre las que destacan la propia Jerte, Casas del Castañar, Cabrero, Rebollar, Navaconcejo, Piornal, Tornavacas, Valdastillas o Barrado, entre otras.
Entre ellas está el término de El Torno, que posee un bonito espacio elevado, conocido como el Mirador de la Memoria, desde el que se divisa todo el valle y la sierra de Tormantos. En él se encuentran las melancólicas esculturas en memoria de los olvidados, de Francisco Cedenilla Carrasco, que se instalaron en 2008.
La zona, perteneciente a Cáceres, dispone de merendero y de un panel de interpretación de la cercana zona de escalada El Cerro, y se llega a ella cogiendo la carretera de subida desde la N–110, un par de kilómetros antes del pueblo de El Torno, que está situado a casi 800 metros de altitud y estuvo habitado desde la Prehistoria, como demuestran los utensilios de piedra –hachas y puntas de lanza– dispersos por el territorio.
El Torno, que cuenta con una piscina natural, exhibe algunas calles interesantes, como Portugal y Barrio del Castillo, con las casas entramadas con solanas. En la iglesia de la Virgen de la Piedad, de mediados del siglo XVI, llama la atención el retablo barroco. En su exterior se diseminan más de 100 chozas pastoriles levantadas en piedra.
Temas
Más en Rutas
-
Subida a la Cruz de la Peña del Castillo desde Laguardia
-
La ermita cántabra de Santa Justa, incrustada en una roca en un acantilado
-
La villa asturiana que no debes dejar de visitar para conocer los palacios indianos más bonitos
-
Aiaraldea, una tierra a visitar con el buen tiempo debido a su gran riqueza natural