LA industria discográfica devora a menudo a sus hijos pero hay músicos como Ibai Marin acostumbrados a reinventarse y renacer cual Ave Fénix. "La industria musical está en continua transformación y el consumo de música ha cambiado muchísimo con las plataformas digitales. Pero yo creo que la fuerza está en bandas locales que tienen por bandera la autoedición, la autogestión, el ponerte tú mismo tus retos y trabajar tus proyectos aunque sea muy difícil sin tener intermediarios. Porque en toda esta avalancha de cambios surge mucho vendedor de humo en el que muchas bandas entran, se arruinan y lo dejan", dice Ibai Marin que acaba de editar un single, Viernes Lobo, antesala de un nuevo trabajo discográfico que verá la luz a finales de este año.

"Hay que ser muy constante. A mí por ejemplo hacer este trabajo me supone mucho dinero porque esto sale de mi bolsillo. Pero hay algo que está por encima de todo que es la pasión por la música. Creo y amo lo que hago y por eso peleo mi proyecto al máximo", dice en alusión a este single que ha sido grabado en directo en los Estudios de Elkar y mezclado en los Estudios AME con Axular Arizmendi. Además se ha contado con la colaboración de músicos como Paul San Martín o el bajista Harkaitz Bastarrika.

El que fuera líder, cantante, guitarra y compositor de la banda Hira durante más de 15 años regresa así con una nueva cara y los dientes afilados. Y es que ya en 2017, Marin decidió sumergirse en un trabajo individual, logrando la conexión entre hermosas melodías, letras impactantes y su característica voz. Volvió a los escenarios hace un año con su disco Bidean naiz, apostando por un viaje autobiográfico a través de cuatro canciones escritas en euskera y otras cuatro en castellano. "Hemos recorrido un buen año, con bastantes conciertos y gran aceptación. Hemos disfrutado mucho del camino y de eso se trata. Ahora volvemos a la escena porque hemos hecho un pequeño parón para componer temas nuevos, y darle espacio a la creatividad", explica.

No en vano, en esta nueva producción hay un claro desmarque con respecto al primer trabajo. "Abandonamos el trayecto íntimo de Bidean Naiz y pasamos a un estilo quizá más desgarrador, más rockero, con tintes más canallas porque la andadura con Bidean Naiz nos ha mostrado las ganas de hacer algo con un poco más de potencia", asegura en alusión al salto que da con este nuevo trabajo, un poco más duro y feroz como explicita el título del single. Una crudeza que tampoco es nueva para él dado que ya exploró alguna de estas corrientes más duras con Hira.

Después de un año "en el que he disfrutado mucho con mi banda y con mi público, que es el mayor logro que puede conseguir un músico, ahora quiero experimentar nuevas sensaciones", aclara. Este músico donostiarra, bregado en mil escenarios, declara sin embargo que ha tocado más en Gipuzkoa que en el resto de Euskadi. "Nos da pena no poder llegar a más sitios. Quizá sea porque nuestras redes de contacto no alcanzan lo suficiente", confiesa. Y eso que su single ya está disponible en los nuevos formatos. "Hay plataformas digitales donde tienes que estar sí o sí, si quieres que tu trabajo se conozca. Antes esperábamos a las novedades que soltaba la emisora de radio, pero hoy por hoy debes estar en las plataformas digitales porque el consumo de música está a un click. Sin embargo, yo echo de menos la vieja escuela. Llámame romántico si quieres, pero me gusta disponer de tu tiempo para comprarte un disco, un vinilo por ejemplo, y dedicar también un tiempo para abrirlo, para darle la vuelta y para escucharlo porque la música te regala tiempo para ti", revela Ibai Marin que, a sus 41 años, llega con sonidos renovados y un single en castellano repleto de instintos básicos.