POCAS cosas nos trasladan a los mayores al recuerdo vivido como el belén; y pocas generan tanta ilusión expectante en los niños/as como ese mismo belén. Valencia es la comunidad estrella de la exposición internacional de Belenes que se puede ver en el Taller-Museo Santxotena (http://www.santxotena.org), de Artziniega (Araba), que celebra su veintiún aniversario mostrando 2.430 belenes -224 nuevas compras- procedentes de los cinco continentes. En esta edición tiene también un protagonista destacado el belén dedicado a la ONCE, "un belén, que, como casi todos los que exponemos, es exclusivo y realizado por encargo", explica a DEIA la pintora Teresa Lafragua, directora del Museo Santxotena y alma mater de la muestra, cuyo montaje comenzó en septiembre.

"El trabajo ha durado más de dos meses porque son miles de piezas agrupadas en los más de dos mil belenes de todo el planeta; es una exposición única y a través de ella ofrecemos a todas aquellas personas que nos visitan un amplio abanico de sensaciones", reconoce sonriente, al tiempo que apunta que la iniciativa comenzó en Bozate (Arizkun), en el valle del Baztán, hasta que decidieron trasladarlo a Artziniega.

Cada belén tiene su propia historia, siempre relacionada con la artesanía de los lugares que visita la pintora y su marido el escultor navarro Javier Santxotena. "Cuando veo/vemos en ferias piezas o una ideas que pueden servir para la exposición intento que los artesanos de la zona me las realice, pero no siempre resulta sencillo; en ocasiones pueden pasar cuatro años hasta que les convenzo de que hagan el encargo para exhibirlo en nuestro Taller-Museo de Artziniega", reconoce Teresa Lafragua.

El Taller Museo Santxotena, uno de los tres que hay en la localidad alavesa fronteriza con Bizkaia, se ha convertido en un auténtico referente en esta época del año. Se calcula que se necesitan unas dos horas para disfrutar de todo el recorrido, que dispone también de tramos guiados. Teresa sostiene que es una buena forma de viajar por el mundo, "ya que están reflejados multitud de países de los cinco continentes".

Porque quienes visiten el Taller Museo Santxotena podrán contemplar, además de los belenes de toda Euskal Herria -con los iconos del Puente de Bizkaia, los arrantzales...- también podrán disfrutar de la mayoría de las Comunidades desde Valencia a Catalunya, Cantabria, Extremadura, Castilla-León, Asturias, Euskadi, Castilla La Mancha, Madrid, Nafarroa, Andalucía, Canarias... así como una amplia variedad internacional, entre la que destacan nacimientos de muchos países africanos, de Perú, México, Colombia, Guatemala, Ecuador, Cuba, Alemania, Francia, Noruega, Italia, Portugal, Chile... Belenes para todos los gustos y realizados con toda clase de materiales: de ganchillo, cerámica, pasta antigua, miga de pan, modelado ... Desde la sencillez de los africanos hasta la sofisticación de los rusos, pasando por la humildad de los belenes de esparto, al lujo de los de plata y también los elaborados con telas brocadas. "Nuestra muestra no tiene nada que ver con otras -que también son estupendas, pero distintas-; intentamos que sea cercana; las piezas no están en las vitrinas, si no que los visitantes las ven próximas, lo que hace las delicias, sobre todo de los más pequeños", indica Lafragua, al tiempo que explica que también tienen reservado un espacio dedicado a los más pequeños. "Hay belenes específicos que generan gran ilusión entre el público infantil -porque en algunos ven a personajes de televisión, títeres- y también a los adultos, sorprendidos por las piezas que aquí se encuentran. Además, aunque en muchos hogares ya no se monta el belén, es una tradición que les gusta recordar porque los transporta a su infancia", apunta Teresa Lafragua, ilusionada y satisfecha por la respuesta que cada año recibe de los visitantes y que la animan a seguir año tras años ampliando la exposición, única en el mundo.

La exposición internacional de nacimientos estará abierta en el barrio Barrataguren de Artziniega hasta el próximo 2 de febrero, de viernes a domingo, entre las once y la una y media de la mañana y de cuatro a siete por la tarde. "Además, se organizan visitas para los grupos que lo soliciten", explica la pintora, animando al público a visitarla.