RUSIA ha emprendido una lucha sin cuartel contra los cigarrillos y pretende dar una vuelta de tuerca a su cruzada contra el tabaquismo. El Ministerio de Salud del país ha propuesto prohibir a cualquier persona que haya nacido después de 2014 comprar cigarrillos, incluso cuando superen la mayoría de edad, que en Rusia se sitúa en los 18 años. Esta prohibición supone que a partir de 2033 ningún ciudadano podrá comprar tabaco en Rusia.

Actualmente, fumar está prohibido en los lugares de trabajo, escaleras de bloques de viviendas, autobuses y trenes de cercanías y dentro de un perímetro de quince metros de las estaciones de tren y aeropuertos. Con la nueva medida, Putin daría así un paso más allá después de que comenzara a restringir en 2013 el consumo de tabaco en lugares públicos. Esta medida ha supuesto una reducción del 10% del consumo solo durante el año pasado.

Esta propuesta forma parte de un documento que detalla los esfuerzos del Gobierno para acabar con el tabaco en el país. La iniciativa ha sido acogida con cierto escepticismo porque incluso los defensores de la medida dudan de que se pueda prohibir algo a toda una generación de personas. Un portavoz del Kremlin dijo que la prohibición se consensuaría con otros ministerios y que la decisión será puesta en común por todos.

Asimismo, algunos expertos alertan de que esta veda podría aumentar el riesgo de que se produzca un mercado ilegal de tabaco. Sin embargo, el Ministerio de Salud defiende la propuesta alegando que entre 300.000 y 400.000 ciudadanos mueren cada año por enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco. Además se señala que en 2033, la prohibición de venta de tabaco a personas nacidas después de 2014 no se verá tan extrema.

Subir el precio Totalmente ajenos al Ministerio de Salud ruso pero en la misma onda sanitaria, el Grupo Español de Cáncer de Pulmón, formado por 400 especialistas de toda España, recomendó este mismo lunes subir los precios del tabaco para reducir el consumo entre los más jóvenes. Una iniciativa que también aconseja la Organización Mundial de la Salud que considera que la subida de precios es una de las medidas disuasorias que más impactan en los jóvenes.

Desde este grupo de investigación se advierte de que el porcentaje de jóvenes que fuma en España sigue siendo muy elevado (un 33 % de las chicas y un 29 % de los chicos entre 14 y 18 años fuma). Además, según el doctor Bartomeu Massuti, secretario del GECP y jefe de oncología del Hospital de Alicante, España “es el país europeo donde antes se accede al cigarro. Si seguimos con estos parámetros, lastraremos todos los avances logrados en supervivencia frente al cáncer de pulmón”.

Los especialistas reclaman medidas de prevención específicos para los jóvenes, con mensajes dirigidos a ellos tal y como se hace con el alcohol. De hecho, el grupo ha lanzado un concurso de spots de 30 segundos bajo el lema No dejes que el tabaco entre en tu vida, dirigido a escolares de 3º y 4º de la ESO, en el que han participado más de 100 alumnos de toda España. Los jóvenes han reflejado que no vale la pena por muchas razones y la del coste también está muy presente, “lo que refuerza la necesidad de una subida de precios”, indicó el doctor Massuti.