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Las modelos más voluptuosas del planeta regresaron el miércoles a Nueva York para la grabación del conocido desfile navideño de Victoria"s Secret. Los famosos ángeles bajaron del cielo para protagonizar la pasarela más espectacular y glamourosa del mundo. La popular firma de lencería reunió en la noche neoyorquina a algunas de las mujeres más impresionantes para presentar sus últimas propuestas en ropa interior. Hace ya 15 años que Victoria"s Secret ha hecho de su desfile anual un show que nadie quiere perderse. Más de una década de sensualidad y belleza en que, a diferencia de otros desfiles de moda, son más importantes los accesorios que la ropa; alas de pluma, brillantes y todo tipo de adornos como guantes de boxeo o colas de pavo real. Esta vez sin Heidi Klum, pero sí con otras esculturales modelos de la talla de Alessandra Ambrosio, Candice Swanepoel o Rosie Huntington-Whiteley, el desfile convirtió la Gran Manzana en un paraíso repleto de ángeles y lujuriosas diosas nada terrenales.

Como si de un querubín más se tratara, la artista Katy Perry fue la encargada de amenizar la noche, luciendo dos diseños del modisto Todd Thomas. Tras ella, la modelo brasileña Adriana Lima abrió la pasarela luciendo el Miracle Fantasy Bra y reapareció más espectacular que nunca y tras haberse retirado el año anterior por su avanzado estado de gestación. Lima y su sujetador de 2.000 diamantes, valorado en más de 1,5 millones de euros, se convirtieron en los grandes protagonistas de la velada.

Sin embargo, y aunque paseó su cuerpazo en un microconjunto de lencería dando fe de que se ha recuperado perfectamente de su embarazo, Adriana confesó que no le resultó nada fácil recobrar sus medidas tras el parto. "No fue nada fácil para mí volver a ponerme en forma para el desfile". Aparte de por su sujetador preferido, Adriana estuvo acompañada por numerosas compañeras veteranas como ella -Alessandra Ambrosio, Karolina Kurkova o Isabel Goulart-, así como por incorporaciones más recientes como Chanel Iman, Candice Swanepoel o Selita Ebank.

Ambrosio lució unas de las alas más impactantes de la velada, con plumas negras y blancas y rematadas con motivos dorados, de casi dos metros de longitud y nueve kilos de peso. En este tradicional desfile, que se empezó a celebrar en 1998 y que este año lo emitirá por televisión la cadena CBS el próximo 30 de noviembre, las modelos más asiduas llevan las alas más grandes e impresionantes.