El año pasado, el Gobierno de Imanol Pradales presentó su primer proyecto de Presupuestos en un clima diferente, en plena fase de tanteo entre el nuevo equipo y los partidos de la oposición, y prácticamente dentro del periodo de gracia que se concede a los nuevos gobernantes. Quizás por ello, la negociación con EH Bildu se alargó con una cascada de ofertas y contraofertas sin que ninguna de las dos partes se atreviera a romper el diálogo, hasta que el grupo de Pello Otxandiano rechazó el último documento que le trasladó d’Anjou. Pero, esta vez, parece que todo se ha torcido desde el primer minuto, y el portavoz de EH Bildu publicó este martes un mensaje en su cuenta de X para cuestionar la “credibilidad” y la “honestidad” del Gobierno vasco, que son “indispensables para construir confianza política”.
El desencuentro ha estallado en la última semana, lo que ya de por sí es significativo porque el proyecto de Presupuestos no se aprobó hasta este martes en Consejo de Gobierno. El miércoles pasado, EH Bildu envió sus condiciones para negociar a los medios de comunicación, y giraban en exclusiva en torno a la vivienda aunque él mismo había situado ese debate al margen de los posibles acuerdos con el Gobierno. Pide un fondo de 3.000 millones, de los cuales 1.000 tendrían que proceder del margen adicional de endeudamiento que pactó el Gobierno vasco con el Estado para la industria. El jueves, el presidente del EBB, Aitor Esteban, llegaba a la conclusión de que Bildu quería hacer “ruido”, y el viernes, en el pleno de control, Otxandiano recuperaba el debate con una pregunta parlamentaria al lehendakari y con una intervención en la que trató de hurgar en las posiciones “antagónicas” de PNV y PSE sobre la vivienda. De ahí que Pradales le recriminara que intente “meter la cuña”. Añadió que Otxandiano no le planteó ninguna medida sobre vivienda en julio cuando hablaron de las directrices presupuestarias, en la ronda de septiembre o en las últimas semanas con el consejero D’Anjou.
Otxandiano ha escrito en sus redes sociales para tratar de desmentirlo. Dice que la propuesta del fondo se la trasladó “personalmente a Pradales el 15 de abril”, que EH Bildu la “detalló posteriormente en el pleno del 22 de mayo”, y que se presentó como “resolución en el pleno monográfico celebrado el 4 de junio, algo a lo que el PNV y PSE votaron en contra”. Es decir, se refería a que EH Bildu le entregó la propuesta en el contexto del pleno monográfico sobre el modelo socioeconómico, pero lo que critica Pradales es que no se la planteara en el contexto del diálogo presupuestario y que tuviera que enterarse por la red social X de que ese era su requisito. Otxandiano, por su parte, añade que el Gobierno vasco “no ha trabajado el proyecto presupuestario con EH Bildu” aunque el consejero D’Anjou dijo que se sentarían con los grupos antes de presentar las Cuentas. La afirmación es ambigua, ya que dice que Lakua “no ha trabajado”, y no dice que no se hayan reunido. Lo que critica Otxandiano es que no ha recibido “respuesta”. “La credibilidad y la honestidad son indispensables para construir confianza política”, zanja. La negociación se tuerce, aunque PNV y PSE tienen una mayoría absoluta suficiente.
El PP augura un proyecto "continuista"
Desde el PP, Laura Garrido confirmó que mantuvieron una reunión “muy preliminar en verano” y habrá que esperar a que se registre este jueves el proyecto íntegro en el Parlamento. Apeló a la “prudencia”, pero ya prejuzgó que van a ser “continuistas” porque “el momento de cambiar eran los Presupuestos anteriores” y, cuando “se aplican las mismas políticas, los resultados son los mismos”. Dedicó buena parte de la intervención a decir que el PNV es “cómplice del Gobierno corrupto” de Sánchez. Parece indicar que la política madrileña puede condicionar de nuevo la negociación en la CAV.
Mano tendida de d'Anjou
El consejero registrará este jueves el proyecto de Cuentas en el Parlamento, y la semana que viene, entre el lunes y el jueves, cada consejero expondrá en comisión los detalles de su departamento. Será después cuando el consejero d’Anjou abra una nueva ronda con la oposición para ver si es posible aprobar las Cuentas con un respaldo más amplio que la propia mayoría absoluta que ya suman PNV y PSE y que les bastaría para superar la votación final del 23 de diciembre. “Espero que todos y todas seamos capaces de mirar más allá del interés partidista. Centrémonos en lo esencial: fortalecer nuestra economía y el bienestar de la gente. Por nuestra parte, el mejor ánimo posible, huyendo de tacticismos”, dijo d’Anjou.