La vicepresidenta segunda del Gobierno español y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha puesto pie en pared frente a la pretensión, a su juicio, de su socio en el Ejecutivo, el PSOE, de extender la vida útil de las centrales nucleares, y le ha advertido de que si da finalmente ese paso estaría "vulnerando" el acuerdo de Gobierno. "Es gravísimo en términos democráticos", ha incidido.

Se ha referido así a las tres condiciones propuestas por el Ministerio de Transición Ecológica, que dirige Sara Aagesen, para llevar a cabo esa extensión de la vida útil de las centrales: garantizar el suministro y la seguridad de estos equipamientos y que no implique costes adicionales para los consumidores.

Descarbonización

Sin embargo, entrevistada en RNE, Díaz ha dejado claro que el acuerdo de Gobierno firmado entre ambas formaciones es "claro en este asunto", y si desde el ministerio de Aagesen deciden seguir adelante se estaría "vulnerando" ese pacto. "No lo vamos a permitir", ha sentenciado.

Desde Sumar consideran que la energía nuclear es actualmente un "elemento disfuncional" en el sistema energético del Estado y que además es "absolutamente peligrosa" y "carísima". Por ello, desde el partido plurinacional abogan por seguir avanzando en la "descarbonización" del sistema energético y apostar por un modelo de energías renovables, reforzando la energía distribuida y el autoconsumo. "Sumar es una fuerza verde porque la emergencia climática es real", ha aseverado.

Por tanto, la formación magenta no comparte la posibilidad de alargar la vida útil de las centrales nucleares, y Díaz ha asegurado que "cuando alguien incumple un acuerdo de investidura está quebrando la confianza democrática y esto es gravísimo, un demócrata no puede hacer eso", ha insistico. Ha subrayado a su vez que sería "la primera vez que se daría" esa eventual ruptura del acuerdo "por parte del PSOE". 

Respuesta socialista

La formación socialista ha respondido por su parte a la carta dirigida a Moncloa por dos eléctricas, Iberdrola y Endesa, en la que plantean la posibilidad de extender la vida útil de las centrales, y ha recordado que "de momento, lo que hay es el plan que se pactó con las empresas energéticas para su cierre paulatino y sustitución por las renovables".

La ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, ha asegurado que dicha carta no presenta una propuesta "sólida" según el criterio del Ejecutivo de Pedro Sánchez, y por tanto "ahí ha terminado toda negociación". En declaraciones realizadas en la Vall d’Uixó (Castellón), ha recordado que "la carta está firmada por dos de las cuatro empresas con las que se llegó a un acuerdo hace unos años para ese cierre paulatino de las centrales nucleares para sustituirlas por energía limpia".

Se ha preguntado a continuación "¿por qué no alarga Iberdrola las nucleares? ¿Por qué pide que la paguemos entre todos y entre todas? ¿Por qué pide que sea la ciudadanía y que, por tanto, sea lo público, lo de todos, los que paguemos un negocio muy concreto que son las nucleares?".

Porque, se ha respondido a sí misma, "han hecho una propuesta que carece de rigor técnico, que no asegura ni la seguridad de las personas ni la seguridad de esa inversión que tendría que hacer la ciudadanía". Ha recordado que el pasado 31 de julio Moncloa remarcó que "no hay negociación abierta ni cambio de posición de ninguna de las partes".

El PP, a favor Por su parte, el PP ha defendido el mantenimiento de las centrales nucleares porque "es bueno para el sistema", y ha celebrado que, según su parecer, el Gobierno abre ahora la puerta a prorrogarlas porque cree que la mayoría de los ciudadanos son favorables a extender su vida útil, incluso aquellos que son vecinos de estas plantas.