El Parlamento Vasco ha sido capaz de transmitir al pueblo ucraniano su apoyo más amplio hasta la fecha en número de escaños. Lo que no fue posible en 2022 sí fue posible este lunes, con una proposición no de ley de PNV y PSE, que fue transaccionada después con EH Bildu y que se saldó con el voto a favor del grupo de Pello Otxandiano y no con su abstención, como había ocurrido hasta el momento. La iniciativa aprobada en la comisión de acción exterior del Parlamento Vasco “condena” la agresión de Rusia contra Ucrania, lo que supone un salto cualitativo porque la formulación inicial de EH Bildu hablaba de “rechazo”, en sintonía con sus reparos históricos a ese término. Y, aunque la propuesta aprobada no habla de la OTAN ni de compromisos en clave militar, sí solicita a la Unión Europea que “fortalezca una política exterior y de seguridad común”. El propio portavoz de EH Bildu en esta comisión, Igor Zulaika, admitió que la iniciativa incluía “elementos que no son propios” de su grupo. Por el contrario, el otro grupo interviniente en esta comisión además de los tres firmantes, el PP, se abstuvo con el argumento de que el PNV había rebajado sus planteamientos para atraerse a EH Bildu.

El Parlamento Vasco ha brindado un respaldo que tiene relevancia desde el punto de vista simbólico. Aunque EH Bildu sí reconoció la vulneración de derechos humanos en Ucrania tras el estallido de la guerra, tanto este grupo como Podemos optaron por abstenerse cuando el debate se planteó en 2022 en el Parlamento Vasco, o cuando se abordó en el Congreso de los Diputados. EH Bildu mantenía el freno de mano echado, porque no podía respaldar los compromisos militares con la OTAN. Incluso llegó a decir que no se puede ganar una guerra a una potencia nuclear como Rusia, una afirmación que sorprende porque, por propia definición, los pueblos que sufren opresión lo hacen a manos de potencias más fuertes desde el punto de vista militar, económico o diplomático, como sucede con Gaza ante Israel, un caso ante el que EH Bildu ha sido muy contundente. Sin embargo, en 2024, EH Bildu plantó al presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, en la recepción del Congreso, en su visita para firmar un acuerdo de refuerzo de sus capacidades de defensa. 

El PNV, por tanto, venía de solicitar a EH Bildu que aclarase si estaba con Rusia o con Ucrania, un debate en el que se entrecruzaba también algún dardo a la izquierda abertzale por la reciente firma de un acuerdo entre Sortu y el régimen comunista de Cuba. El debate de este lunes se sustanció dejando claro que se mantienen “muchas diferencias de fondo”, como dijo desde el PNV Mikel Arruabarrena, pero cuajó en un acuerdo de cinco puntos respaldado por casi el 90% del Parlamento.

Los cinco puntos de la proposición no de ley

La proposición no de ley dice que el Parlamento Vasco “condena a la agresión de Rusia contra Ucrania y se reafirma en la defensa de la plena soberanía ucraniana”, “muestra su solidaridad con el pueblo ucraniano y el apoyo a toda la población civil que ha sufrido las consecuencias de la guerra”, “valora positivamente las iniciativas de la UE orientadas a la búsqueda de la paz descrita en el punto quinto de la presente enmienda y la atenuación de las consecuencias de la guerra sobre la población civil”, “solicita a la Unión Europea que fortalezca una política exterior y de seguridad común europea para la proyección internacional de los valores fundacionales de la Unión y el reforzamiento de su autonomía estratégica”, y apuesta por una “paz justa, global y duradera” y por canalizar la orientación de las alianzas internacionales “como en particular su posible adhesión a la UE”.

Las diferencias

La propuesta inicial de EH Bildu aspiraba únicamente a “rechazar” la invasión, e incluía un apartado contrario al impulso militarista y otro a favor de la autonomía estratégica europea, sin ninguna mención al refuerzo en materia de seguridad. La de PNV y PSE, por su parte, incluía inicialmente, por ejemplo, una referencia a las sanciones a Rusia. Desde el PP, Ainhoa Domaica se quejó de esa ausencia y de que no haya referencia a la acogida de personas refugiadas, y consideró que el PNV ha “rebajado todas sus exigencias por llegar a un acuerdo con EH Bildu”. “La propuesta original era impecable. Han decepcionado a la comunidad ucraniana”, lanzó.

El jeltzale Arruabarrena reconoció que PNV y EH Bildu tienen “muchas diferencias de fondo” y que los jeltzales han sido “críticos con la postura que ha adquirido EH Bildu porque es una forma de revictimizar al pueblo ucraniano, negarle las armas es dejarlo a los pies de los caballos,” cuando tiene derecho a la “legítima defensa”. Desde EH Bildu, Igor Zulaika reconoció que hay conceptos que no son “propios” de su grupo en el texto, pero apostó por seguir explorando ese camino en el futuro, y deseó que no lleguen muchas más iniciativas de este cariz al Parlamento.