Alberto Núñez Feijóo y Juanma Moreno fueron recibidos ayer martes con una fuerte ovación de cargos del partido a su llegada a Génova, al ritmo del Glory dayspara participar en la Junta Directiva Nacional, donde el líder del PP instó a los suyos a tirar por la vía de la moderación para desalojar a Pedro Sánchez de La Moncloa. Una estrategia de centralidad y moderación sin hipotecas que se autoimpone como modelo para ir “construyendo mayorías sociales” frente al “claramente desbordado” Ejecutivo de coalición. Al líder del PP, Moreno le dijo que desde el sur le miran “con respeto” y “esperanza”. “Esta responsabilidad que yo asumo también en parte es tu responsabilidad”, añadió en unos “deberes” que Feijóo asumió. El discurso con el que el dirigente gallego arengó a los suyos fue casi un calco, recomendando huir de “triunfalismos injustificados” y edificar “desde la serenidad, la seriedad y la sensatez” una alternativa al sanchismo. Feijóo hizo suya la meta de gobernar en solitario porque desde “una constelación de minorías se puede llegar al Gobierno, incluso resistir, pero no gobernar”; y colocó a Sánchez fuera de la realidad por el análisis que los socialistas han hecho de su derrota electoral. El mensaje contrasta con la batalla ideológica que propugna Isabel Díaz Ayuso, pero tanto Génova, como los dirigentes autonómicos niegan que el modelo de centralidad y moderación sea una enmienda a la lideresa.