El presidente de la Ejecutiva jeltzale, Andoni Ortuzar, se reunió ayer lunes con los sindicatos ELA, LAB y ESK acompañado por la burukide del área laboral, Nerea Melgosa, y el burukide de asuntos económicos, Joseba Aurrekoetxea. Por parte de las centrales sindicales, acudieron Pello Igeregi, de ELA; Xabier Ugartemendia, de LAB; e Igor Mera, de ESK. Los sindicatos pusieron sobre la mesa su plataforma de reivindicaciones en nombre de ELA, LAB, ESK, Steilas, HIRU y Etxalde, los mayoritarios. Estos sindicatos han iniciado una ronda con los partidos y trasladaron al PNV dos objetivos: "poner límites a las facilidades que ahora tiene la patronal para realizar despidos", y "que nuestra negociación colectiva sea respetada sin injerencias externas". Si no se cumplieran estas condiciones, piden a los partidos que voten en contra en la sesión del jueves para abrir una negociación en la que ya no esté la patronal CEOE. Llaman a concentrarse el miércoles ante los centros de trabajo.
El PNV, por su parte, comparte "la práctica totalidad de esas demandas". "Pero, teniendo en cuenta tanto el contenido del acuerdo ya firmado por sindicatos, patronal y Gobierno central como los requisitos de la Unión Europea, la delegación jeltzale se ha mostrado partidaria de centrar todos los esfuerzos negociadores en preservar el ámbito autonómico, un objetivo que considera alcanzable a día de hoy", explicaron.
En el caso de Podemos Euskadi, con quien también se reunieron ayer lunes los sindicatos, le exigieron que "cumpla su palabra de que la derogación de la reforma laboral sea la nueva base para el Estatuto de los Trabajadores". EH Bildu ya mantuvo esta reunión el viernes y comparte la idea de votar en contra si no se revisa tampoco la indemnización por despido. Aunque la coalición presentó una declaración con ERC y otros partidos, los republicanos catalanes han evitado exigir el 100% de esos puntos.
CEBEK
La patronal vizcaina, Cebek, cree que la prevalencia de los convenios vascos está garantizada con el acuerdo con los sindicatos ELA y LAB de 2017. Según Francisco Azpiazu, "no hay dudas".
