Bilbao. La secretaria general del PP, Maria Dolores de Cospedal, salió ayer al paso del auto emitido la pasada semana por el juez Pablo Ruz, en el que se señalaba la existencia de una contabilidad B en la formación de la calle Génova. En una comparencia pública tras la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del partido, la número dos de los populares aseguró que "en el PP solo hay una contabilidad y los papeles o cuentas que tengan otros, serán de otros", en alusión a la trama desvelada por Luis Bárcenas, ahora en prisión. Cospedal, además, señaló que pedirán al fiscal encargado de este caso que revise las cuentas del PP.

Rajoy contó también con la defensa de la presidenta del PP de la CAV, Arantza Quiroga, que cuando saltó el escándalo desligó a la formación vasca de la trama y reclamó de la dirección de su partido que aclarara las acusaciones de Bárcenas. Quoroga dijo ayer que "Rajoy ya ha dado explicaciones en sede parlamentaria, explicaciones que fueron convincentes". A su entender, "ahora son los jueces los que tienen que hablar".