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Barcina se esforzará en mantener viva la coalición con el PSN

La presidenta navarra anuncia más recortes si es necesario, a pesar del rechazo de los socialistas

Barcina se esforzará en mantener viva la coalición con el PSNFoto: EFE

iruñea. La presidenta del Gobierno Foral y de UPN, Yolanda Barcina, apostó ayer en una asamblea de su partido por "empeñarse y esforzarse" en proseguir con "el trabajo común" en el Ejecutivo de coalición de UPN y PSN, "por encima de rencillas y recelos" que puedan surgir entre regionalistas y socialistas.

En su discurso, Barcina se refirió a la "crisis" abierta en el Gobierno de Navarra por el nuevo ajuste de 132 millones anunciado el pasado viernes que los socialistas rechazan por ser una decisión "unilateral" de UPN. La presidenta resaltó que el Gobierno de coalición con el PSN es "el mejor" posible para hacer frente a la crisis y aseguró que el Gobierno de coalición "está aportando algo sumamente necesario en estos momentos, la estabilidad".

En su opinión, "si los acuerdos y los consensos son siempre necesarios, en este difícil momento resultan imprescindibles". Respecto al apoyo de UPN a las "duras medidas que se está viendo obligado a tomar Mariano Rajoy", señaló que "históricamente a Navarra siempre le ha convenido que el Gobierno foral tenga una buena relación con el Gobierno de España", y habló también de convicción, "porque salir de la crisis es una tarea común".

En relación al cumplimiento del objetivo del déficit, Barcina indicó que no se puede comparar a Navarra con otras comunidades en un sólo trimestre, ya que las aportaciones al Estado se producen en momentos diferentes. La líder de UPN explicó que los recortes obedecen al descenso del 13,5% de los ingresos en lo que va de año. "Hay que tomar medidas ya", dijo

Así, recordó que la decisión tomada la pasada semana de retirar 132 millones de euros del presupuesto se suma a los 54 millones ya anunciados y no descartó "tomar más porque queremos cumplir el objetivo de 1,5% de déficit". En su discurso, Barcina, además recordó la "difícil situación económica" que tiene que capear su Gobierno y "la desagradable tarea de hacer ajustes o recortes en servicios " y de "suprimir temporalmente algunos derechos de los funcionarios". El objetivo de control de déficit justifica todos esos sacrificios a su juicio.