bilbao. El Gobierno vasco organizará en el mes de abril un Congreso sobre convivencia y memoria para abordar las "consecuencias del terrorismo" y contribuir a la creación de un relato "veraz" sobre lo ocurrido en Euskadi a la sombra de la violencia de ETA. Según adelantó ayer el lehendakari, esta iniciativa contará con el testimonio de víctimas y de expertos internacionales que arrojarán luz al pasado y al presente de Euskadi desde la óptica del "respeto y el dialogo". Además, se exhibirán diversos paneles sobre las "consecuencias" y el "daño" causado por ETA a la sociedad vasca en su más de media década de existencia.
A falta de que el Ejecutivo vasco desgaje los detalles de este acto, las comparaciones de este Congreso con la Conferencia de Aiete celebrada en octubre -que cogió a López de gira por Estados Unidos- llegan a tal punto que el propio lehendakari tuvo que desmentir ayer que la celebración sea una contraprogramación de la Conferencia de Paz. "No se hace contra nadie, sino a favor de la libertad y la consolidación de la paz en Euskadi", advirtió el lehendakari.
Pese a negar cualquier relación con la Conferencia que auspició la izquierda abertzale, el Gobierno vasco ha acelerado su hoja de ruta en materia de pacificación después de que las críticas recibidas por su ausencia en los compases finales de ETA afloraran incluso en el seno del PSE.
De hecho, después de que el comunicado de cese de ETA le pillara viajando en tren de Washington a Nueva York, el lehendakari ha reclamado en más de una ocasión su espacio en el proceso de normalización política: primero anunciando una ronda de contactos con el resto de partidos políticos, después pidiendo un acercamiento de los presos de ETA y más tarde jactándose en campaña electoral de haber acabado con el terrorismo.
Por ello, el anuncio de la celebración de un Congreso sobre convivencia y memoria buscaría también, al igual que la izquierda aber-tzale en Aiete, un eco internacional que avalara la puesta en escena del Gobierno López, como ya hicieran destacados miembros como Koffi Annan o Gerry Adams en Donostia.
En este sentido, Lakua ha enmarcado este Congreso dentro del Año de las Culturas por la Paz y la Libertad que el Ejecutivo vasco pondrá en marcha a lo largo de este año mediante un puñado de celebraciones ligadas al mundo de la cultura, la memoria histórica o los derechos humanos y que comenzará en febrero en el museo Bellas Artes con una exposición sobre la guerra civil española: La maleta mejicana.
En el mes de julio, intelectuales, pensadores y artistas internacionales comprometidos con los derechos humanos se darán cita en Bilbao para celebrar una jornada bautizada como La cultura toma la palabra. Según adelantó ayer el lehendakari, el Gobierno vasco ha confirmado ya la asistencia, entre otros, de la actriz estadounidense Susan Sarandon, el sociólogo polaco Zygmunt Bauman, el oscarizado director Charles Ferguson y el escritor Antonio Tabuchi, un elenco de personalidades encargados de lanzar al exterior el mensaje "justo y veraz" del lehendakari sobre la existencia y la actividad armada de ETA en Euskadi.