bilbao. Después de que el Parlamento Vasco rechazara el pasado día 10, gracias a los votos de PSE y PP, reclamar al Gobierno español que pida perdón por el bombardeo de Gernika, ayer fue el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, el que se opuso a una iniciativa impulsada con ese mismo fin por el senador del PNV Iñaki Anasagasti. En la sesión de control al Ejecutivo de la Cámara Alta, el ministro justificó su negativa señalando que "la democracia ha puesto a cada uno en su lugar" y recordando las condenas que ya se han hecho de ese episodio.

En declaraciones a DEIA, Anasagasti lamentó que "del Gobierno español sólo tenemos el no" y opinó que "lo que más duele es que el PSOE, que fue damnificado por la Guerra Civil, utilice el mismo lenguaje que el PP y que los unionistas irlandeses". Muy crítico con el gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero, el senador jeltzale consideró que "es curioso que a la gente de HB y de ETA le piden condenas y ellos no condenan nunca nada".

Durante el debate de ayer en el Senado, Francisco Caamaño apeló a la Ley de Memoria Histórica para desestimar un pronunciamiento explícito sobre el bombardeo, ya que la misma "declara el carácter radicalmente injusto de cualquier forma de violencia contra personas por razones políticas ideológicas o de creencias religiosas durante la guerra". Iñaki Anasagasti rechazó este extremo y aseguró que "el Gobierno siempre se ampara en la Ley de Memoria Histórica, pero ésta es un saco sin fondo y nosotros lo que pedimos es una postura absolutamente clara con Gernika".

valor político El senador del PNV considera "una vergüenza" la posición del Gobierno español, sobre todo después de que el primer ministro británico, el conservador David Cameron, "haya tenido el valor político de reconocer que en el Domingo Sangriento las tropas británicas cometieron un error, un exceso y un asesinato".

Por todo ello, Anasagasti reclamó ayer al ministro de Justicia "un gesto" como el traslado del Gernika de Picasso a Euskadi para "cerrar la herida", a lo que el Ejecutivo se niega para evitar, según su postura, posibles daños en el cuadro. "Cuando el hombre llega a la luna, cuando se hacen trasplantes de corazón, ustedes nos mienten con el cuadro y nos niegan un gesto", defendió el jeltzale ayer en el Senado.

"Lo más sarcástico es que presenten la transición política española como un modelo para otros países. Todo esto me parece una vergüenza", concluyó.