Bilbao. El Acuerdo de Schengen, que establece una zona de libre circulación con la supresión de las fronteras comunes entre los 25 países que lo han suscrito hasta el momento, cumple hoy 25 años como hito a la hora de lograr una Europa en la que sus ciudadanos circulen sin cortapisas entre sus países miembros. Sin embargo, se trata de un logro incompleto, al menos en lo que a la Ertzaintza se refiere. Y es que el Estado español se adhirió al Tratado de Schengen con un acuerdo firmado con el Estado francés el 25 de junio de 1991 que incluía dentro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado a la Guardia Civil, la Policía española y el CNI. No así la Policía vasca, que desde entonces ha venido reclamando, sobre todo a través de los gobiernos vascos del PNV, su incorporación plena a este espacio.
Esta reivindicación persigue, más que posibilitar persecuciones en caliente o incluso la detención de criminales en suelo galo, facilitar que la Ertzaintza pueda realizar seguimientos e investigaciones en el país vecino, como es bien sabido, el principal centro de operaciones de ETA. En cooperación con otros cuerpos policiales españoles y franceses, si hiciera falta, pero en pie de igualdad con los mismos.
Este hecho supondría revivir los años en los que la Policía vasca sumó varios éxitos encadenados contra ETA, como el desmantelamiento de su entramado financiero, gracias a una fructífera colaboración con la Policía francesa, durante los años de Juan Mari Atutxa al frente de la Consejería de Interior. Sin embargo, este salto de la Policía vasca se producirá sólo con el visto bueno del Gobierno español, si decide incluirla dentro de las FSE.
La llegada del PSE al Gobierno vasco ha diluido aún más esta posibilidad, pese a tímidos avances como la reciente incorporación de la Ertzaintza al puesto fronterizo de Hendaia junto a la Guardia Civil, la Policía española y la Gendarmería. Este paso se encuentra, no obstante, lejos de incluir más competencias en la lucha antiterrorista.
Países miembros Todo comenzó con el primer acuerdo firmado el 14 de junio de 1985 por Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Alemania y Francia, y que supuso el primer paso para una Europa libre de controles fronterizos. Actualmente son 25 los países que integran el Acuerdo de Schengen, casi la totalidad de los miembros de la Unión Europea junto con Islandia, Noruega y Suiza. El proceso continúa, y así Liechtenstein será en breve parte de la zona. Bulgaria y Rumanía preparan su ingreso, por lo que la lista de países miembros podría aumentar en breve hasta 30.