Jon Rahm no ha querido esperar al inicio del nuevo curso del LIV Golf el mes que viene y ha adelantado su vuelta a la competición a esta semana para disputar desde mañana por primera vez en su carrera el Dubai Desert Classic, uno de los mejores torneos del DP World Tour que cuenta con una participación muy destacada y liderada por Rory McIlroy, último ganador. El golfista de Barrika no compite desde finales de octubre, cuando jugó el Andalucía Masters en Sotogrande, y está deseoso de sacar su mejor juego porque su objetivo es muy claro: estar en septiembre en Bethpage en el equipo europeo de la Ryder Cup.

Para ello, necesita sumar puntos que le impulsen de nuevo en el ranking mundial y tiene que hacerlo muy bien en aquellos torneos fuera del LIV porque este sigue sin puntuar, una situación que a Rahm le parece “un error” y no se cansa de criticar. Aún no hay acuerdo entre los diferentes circuitos, pese a que se proclamó hace año y medio y no parece que vaya a llegar pronto. “La situación no es la que debería ser. El golf ahora mismo tiene infinitas posibilidades de ofrecer un producto muy atractivo y ponerlo en un nivel aún más alto como deporte, pero tienen que juntarse las mentes adecuadas para ello”, declaró en Dubái. Respecto a su situación particular, la apelación que interpuso para poder disputar torneos del DP World Tour sin ser multado sigue en pie y “no sé qué va a pasar, pero espero que no intenten resolver la apelación antes de la Ryder Cup. No creo que eso sea bueno para nadie”.

Jon Rahm planea disputar las catorce citas del LIV, los cuatro majors y el BMW Championship de Wentworth y el Open de España en su calendario de este 2025. Para empezar, compartirá su primer partido del año con el escocés Roberto MacIntyre y el australiano Adam Scott. El barrikoztarra ya ha ganado dos veces en Dubái en el torneo que cierra el DP World Tour en Jumeirah, pero se estrena en el Emirates Golf Club, aunque las condiciones del campo le pueden venir bien. Poco a poco, tendrá que afinar su juego ya que también desea llegar al Masters en mejor condición que el año pasado. Al menos, lo hará con dos torneos más.