Síguenos en redes sociales:

La tabla que hace los sueños realidad

Araña dio a conocer ayer en Mundaka un modelo especial para invidentes

La tabla que hace los sueños realidadBorja Guerrero

Mundaka

VALDEMIR Pereira perdió completamente la visión cuando apenas había superado la veintena. Un golpe fatal que le hizo encerrarse en casa, olvidarse del mundo exterior y abstraerse de la sociedad. El brasileño había tocado fondo y parecía casi imposible salir de ahí. Hasta que un anuncio en la radio le cambio la vida para siempre. Valdemir escuchó que la Escuela Radical Semes Sthill de Santos le daba la oportunidad de disfrutar del surf. No importaba ni su discapacidad, ni que no tuviera dinero. El centro estaba abierto para todo el mundo. A partir de ahí, Pereira descubrió su pasión y junto a el exsurfista brasileño Francisco Araña, empezaron a trabajar en un proyecto para que los invidentes pudieran disfrutar de este deportes sin ataduras. Con una autonomía total. Un sueño sobre las olas que se convirtió en realidad y cambió su vida y la de su profesor para siempre. Ahora, Cisco ha decidido dar a conocer esta experiencia por todo el mundo.

Araña y su equipo desarrollaron una tabla adaptada para los invidentes, en la que la superficie está diseñada con diferentes relieves y con una quilla recubierta con goma para que el surfista pueda disfrutar de las olas en las mejores condiciones. "Es un modelo que habla porque le da toda la información posible al surfista", comenta Cisco. Sin embargo, este proyecto no se desarrolló en un abrir y cerrar de ojos. Fueron muchas horas de trabajo de investigación, de momentos difíciles y, sobre todo, de muchas caídas hasta que consiguieron la tabla definitiva. "Este proyecto viene desde hace mucho tiempo. Comenzamos a trabajar con Valdemir hace diecisiete años y los últimos diez nos dedicamos a hacer adaptaciones", relata el exsurfista, que comenzó a enseñar en la escuela de surf de Santos porque notaba que "a pesar de haber estado muchos años en las competiciones y ganar trofeos, me faltaba algo".

La vida de Pereira dio un giro de 180 grados con este proyecto. "Ahora solo somos la tabla, el mar y yo", comentaba sonriente Valdemir el día que probó por primera vez este diseño. "él está volando, con autonomía y es libre para hacer lo que quiera. Es un hombre de la sociedad como otro cualquiera. Antes no hacia nada, solo estar en casa. A partir del momento que entró tuvo la oportunidad de hacer algo, para él fue una diferencia enorme. Como profesores nos sentimos muy agradecidos por el cambio que ha dado", declara orgulloso Araña. Y es que gracias al surf, el invidente brasileño consiguió una beca, con todos los gastos pagados, para estudiar educación física y ahora acaba de terminar primero de derecho siendo el tercero de su promoción. Un hecho impensable para él hace unos pocos años.

Esta tabla daba a sus creadores una oportunidad fantástica para patentar su invento y sacar grandes ganancias económicas. Pero Cisco ni se lo pensó. Este proyecto era un regalo para todo el mundo. "No queremos vender nada, solo ayudar. Además deseamos que esto sea un espejo y que además lo mejoren". Por ello, gracias al World Surf Cities Network -red de colaboración entre las ciudades surfistas de Donostia, Durban, Las Palmas, Newcastle, Gold Coast, Santos, Arica, Hossegor y Ericeira- y con el proyecto Soñando con Olas, Araña se ha embarcado en su viaje más especial, que le llevará por todo Europa dando a conocer esta tabla. Además, regalará a las escuelas que visite ejemplares de este modelo para que puedan usarlas, copiarlas y mejorarlas en beneficio de todos. Ayer, Cisco hizo escala en Mundaka y le dio al Club de Surf una tabla que estará disponible para todo el que quiera usarla; algo que también hizo en Donostia hace unos días, donde ya se ha programado una prueba en la playa de La Zurriola. Su próxima parada será Las Palmas donde también dejará gratuitamente cuatro ejemplares.

Una escuela altruista

La escuela de surf de Santos destaca por ser un ejemplo de solidaridad. "Tenemos alumnos desde los cuatro hasta los ochenta años y nuestras puertas están abiertas para todo el mundo. El que quiera puede coger una de las tablas sin coste alguno", explica el exsurfista brasileño. La Escuela Radical Semes Sthill lleva 21 años enseñando, gratuitamente, a la gente. Sin esperar nada a cambio. "Nosotros entendemos el surf como un deporte para todos. No es solo para los que cogen las olas más grandes o hacen las maniobras más difíciles. También se puede hacer en la orilla sin ningún problema. Es un deporte para divertirse y a través de eso se consigue salud, estamos felices, conocemos a gente que es mejor que nosotros y aprendemos a lidiar con distintas clases sociales, físicas y emocionales", explica así Cisco su manera de entender el surf. Su filosofía. Una forma altruista de hacer que su sueño se convierta en el sueño de todos y que cualquier persona, sin importar ni su condición social ni física pueda disfrutar de las olas, de las sensaciones únicas que solamente el mar y el surf son capaces de dar.