Después del psicodrama bufo del miércoles, la archifamosa súbita Leire Díez sigue reinando en los principales titulares a ambos lados de la línea imaginaria.
En la trinchera diestra hay grandes festejos. Mientras, las huestes sanchistas se llaman andanas e, infructuosamente, tiran del comodín de la sucia campaña orquestada por “la fachosfera”, aunque sus socios cercanos y periféricos (Sumar, Podemos, ERC, entre otros) piden a Ferraz que explique de una santa vez si la interfecta iba por libre o trabajaba al servicio del aparato.
#Hola,Leire
El PP aprieta y se guasea
Encantados de conocerse, en Génova no sueltan la presa que les sirve como reclamo para que su movilización del domingo alcance registros históricos.
En su penúltima ocurrencia, el PP difundía una imagen en blanco y negro de varios dirigentes socialistas tocados por los presuntos marrones bajo el epígrafe “mafia” en la misma tipografía de la trilogía El padrino, de Francis Ford Coppola.
Esto, mientras la sucursal feijoiana en Paiporta (zona cero del desastre de la dana, se lo juro) se permitía la gracieta de enviar un guasap fake a Leire Díez pidiéndole que, en su condición de fontanera, les echara una mano.
Indignidad de manual que ha desatado una oleada de cagüentales, Hay que ser torpe.
#NiUnaAsambleaDePueblo
Puente y los resentidos
En medio de la tempestad, el imposible de callar Óscar Puente atizaba con lo gordo de la minipimer al bien colocado verso suelto de su partido Eduardo Madina por haber dicho en la Ser que ni Zapatero ni Rubalcaba hubieran permitido una Leire Díez. “El que faltaba del cuarteto de los resentidos”, vomitaba Puente.
ElChisteDelFalcon
Sánchez, jijí-jajá
A todo esto, Sánchez, ni una palabra. Su única comparecencia de ayer fue para responder a un chiste sobre su Falcon en el programa de Broncano en la televisión pública española. Seguro que a él y a su responsable de redes les pareció buena idea. pero la cantada comunicativa fue épica.
Como bonus-track, nos hacemos eco del titular que dejó Esperanza Aguirre en su entrevista a El País: “A la larga, la dictadura fue mejor que la II República”. El historiador Julián Casanova apostilló: “Dicen que los jóvenes prefieren la dictadura a la democracia, pero tienen maestros”. Así de triste.