FUE la tempestad, ¿se acuerdan? Y una vez suavizado el temporal hace falta ver qué estragos dejó a su paso semejante catástrofe, algo que no puede contemplarse hasta que no salga el sol. Poco a poco lo va haciendo y ahora se van descubriendo los destrozos: algunos que saltan a la vista y otros que ocultos bajo los males que se nos avecinaron.

El año del covid-19, el más difícil en muchas generaciones, también tenía que tener su repercusión en la gastronomía. Era impensable que todo el mundo lo esquivase. Así, en la Guía Michelin de España y Portugal 2021 se detectó un fenómeno astronómico sorprendente: la pérdida de luz de un puñado de estrellas Michelin. Entre ellas se encontraba la de Eneko Bilbao, el establecimiento desde el que Eneko Atxa se proyectaba en el Palacio Euskalduna. El propio Palacio entró en una suerte de hibernación y el restaurante no pudo mantener las puertas abiertas en ese mundo. Se esfumó la estrella, para desgracia de quienes aman la gastronomía.

La noticia ha encontrado ahora su continuará... en este tiempo de reajustes, toda vez que se acaba de anunciar una oferta del propio Palacio Euskalduna, que busca un gestor de su gastronomía en todas sus modalidades, desde el catering hasta el restaurante de más altos vuelos. En los pliegos anteriores estaba registrada la firma de Eneko Atxa hasta 2022, con la posibilidad de una renovación automática del compromiso. De momento un halo de misterio se cierne sobre su continuidad pero da la impresión, vistas las nuevas condiciones de la oferta, que Euskalduna busca un nuevo chef. No les será fácil. No en vano, por el Palacio Euskalduna han pasado manos prodigiosas para la cocina. Fernando Canales, que lanzó al estrellato al restaurante Etxanobe Fernando Canales,, y Eneko Atxa, quien parecía asentado con su Eneko Bilbao de una estrella Michelin antes de que rompiese a llover.

¿Será un deseo expreso del cocinero de cambio de aires, será la constatación de que ese mercado de altos vuelos culinarios tardará más tiempo del deseable en relanzarse, será que alguna de las dos partes ha quedado descontenta con la relación? “Que será, será”, que cantaría Doris Day. Sea lo que sea, la verdad es que hemos perdido todos con esa ausencia.