EL murciano Sánchez Martínez, que ha pitado varios derbis desde que llegó a Primera División, ha mejorado mucho desde que dirigió el primero. Ayer no perdió su estilo personal, controló a los jugadores y supo aplicar correctamente el reglamento en los apartados técnico y disciplinario. En el minuto 6, no hay mano de Balenziaga dentro del área, algo que reclamó la grada de Anoeta. También acertó en amonestar poco después a Raúl García por una entrada innecesaria a De la Bella, aunque el centrocampista rojiblanco protestó sin tener razón. De Marcos vio la amarilla en la primera parte por un codazo en un choque con Zurutuza. Nada que objetar. En el minuto 20, no hay nada cuando Córdoba cae dentro del área. Y cinco minutos después, en este caso Illarramendi, es bien amonestado por un agarrón a San José. Ya en la segunda parte, en el minuto 58 Iñigo Martínez remata de cabeza y el balón impacta en el brazo de Llorente. Un penalti justo y claro que el colegiado murciano no dudó en señalar. Sánchez Martínez se equivocó, según mi opinión, en sacar tarjeta amarilla a Williams por una entrada más aparatosa que otra cosa. Pardo, por su parte, no se puede quejar por ver la roja tras una falta sin posibilidad de jugar el balón que hizo a Mikel Rico. En la tangana posterior fueron amonestados correctamente Willian José y Muniain.
