Cumplió el expediente
LA verdad es que el valenciano Martínez Munuera empezó el partido dejando jugar en exceso, ya que hubo dos o tres entradas de los jugadores del Alavés a destiempo que el colegiado debió castigar más. Aquí se equivocó. En el minuto 52, existe una mano dentro del área de Manu García totalmente involuntaria. No hay penalti. Cuatro minutos después, no existe falta de Yeray cuando Feddal cae dentro del área, ya que el futbolista babazorro se apoya en el cuerpo del central del Athletic. En el minuto 62, el público de Mendizorrotza y los jugadores del Alavés reclamaron una mano de Beñat. Es verdad que le da, pero es de rebote, ya que el balón le golpea primero en el pie y de forma involuntaria le da después en el brazo. No hay nada punible. Martínez Munuera no se equivocó en esta acción.
También reclamaron la pena máxima los locales cuando Kepa, dentro del área, obstruye a Sobrino. Pero el colegiado había señalado previamente fuera de juego. Técnicamente bien, Martínez Munuera controló el partido en todo momento y quizás le faltó mostrar alguna tarjeta amarilla en la primera parte. No influyó, para nada, en el resultado final de un derbi que el Athletic pudo decantar a su favor si llega a acertar alguna de las ocasiones de las que dispuso. No siempre se pueden ganar todos los partidos, pero los leones se están jugando mucho para dejarse tres puntos en el camino en Mendizorrotza.