Se decía que el poder de los reyes que en el mundo han sido les venía directamente de Dios, o sea del dios o de los dioses oficiales de su reino. Los que no creemos en tales milongas siempre hemos sabido que tal poder les ha venido siempre de los ejércitos, que después de ponerlos en el trono se encargaban de mantener en el cargo a la dinastía o rama de la dinastía correspondiente o bien de derrocarla, según de dónde soplara el viento. Por ello los reyes se llevan tan bien con los militares no se vayan a mosquear estos, que el exilio es duro. En el año 2023 dC hemos conocido que la hija mayor de Felipe y Letizia tendrá una intensa formación militar que adquirirá a lo largo de tres largos años. Y también que en la Casa Real de los Borbones, de los once altos funcionarios que la gestionan a día de hoy siete son militares. Ello unido a la afición del Jefe de la Casa de vestir uniformes varios en los actos elegantes o trascendentales dicen más de lo que parece de la estructura política española que sigue bastante atada y bastante bien atada. A mí esa impresión me da.
