Estamos acostumbrados en los últimos meses a recibir informaciones constantes de los déficits en atención sanitaria , ya sea por falta de profesionales médicos, por saturación en las consultas, por las secuelas de la pandemia, etc.
En esta ocasión, el que suscribe, que ha sufrido una baja por IT de 18 meses (desde junio de 2021 hasta diciembre de 2022) y durante la cual he tenido que ser atendido en múltiples ocasiones por diferentes departamentos médicos de Osakidetza Barakaldo (Hospital San Eloy, centro de salud de San Vicente, centro de Salud de Zaballa), tengo que expresar mi más profundo agradecimiento y reconocimiento al trabajo, esfuerzo, dedicación y sobre todo, compromiso en atenderme en los plazos que marcaba mi enfermedad, volcándose en ofrecer una atención médica y humana de máxima calidad. Para todos ellos/as parecía que yo era su único paciente por la dedicación que me han prestado. En concreto, quiero agradecer el excelente trato recibido en urgencias de San Eloy, donde me atendieron con la máxima rapidez y diligencia.
En lo que se refiere al centro de salud de San Vicente, mi reconocimiento y gratitud a la médico de familia Begoña Alonso Rodríguez y a la enfermera Amaya García Arechavala. Y en el centro de salud de Zaballa, a los médicos psiquiatras Juan Medrano Albéniz y Carlos Soler González, que ante un problema de salud mental que he sufrido de bastante complejidad, y del que todavía no me he recuperado totalmente, aparte de sus conocimientos médicos, me han ayudado en el aspecto humano y sobre todo, han sabido escucharme y dedicarme el tiempo necesario para afinar con el diagnóstico y la medicación prescrita. A todos ellos mi máximo reconocimiento y gratitud. Y no dudo que con el resto de sus pacientes actúan de la misma manera.