Durante más de 7 años he sido profesora en la Facultad de Ciencias de la Comunicación y el Instituto Europeo de Protocolo de la Universidad Camilo José Cela, de la que tengo muy buenos recuerdos, he hecho grandes amistades con mis compañeros y he compartido experiencias muy especiales con mis alumnos.

Quiero manifestar que estoy muy indignada con las recientes informaciones de las tesis doctorales que son plagiadas y que no se puede generalizar metiendo “las patatas calientes en el mismo saco”. El título de Doctor, máximo reconocimiento académico, requiere de años de esfuerzo y estudio que enriquecen nuestra sabiduría, con un único objetivo de gran responsabilidad: formar a los hombres del futuro.

Quiero elogiar a la ex directora general de Educación concertada, becas y ayudas al estudio de la Comunidad de Madrid, Concepción Canoyra, por presentar su dimisión tras desvelarse que se doctoró con una tesis que contiene copia de párrafos enteros, titulación que obtuvo en la Universidad Camilo José Cela. Pero, no son de recibo sus declaraciones de que “hay alguna frase copiada, como en todas las tesis” y su contundente afirmación “como en el 99% de las tesis de este país”. Tendríamos que recordarle que “cree el ladrón que todos son de su condición?”.