Conflicto político en Euskadi es un término tabú para muchos, como para el señor Alonso, que se aprovecha de las víctimas de ETA para mantener rescoldos. Recuerden que ETA surgió en pago de la férrea e injusta dictadura posbélica que creó una espiral violenta de 95 asesinatos que en 1978, ante la incómoda situación, se canjearon tal cual cromos, para redimir la época franquista sin contrición alguna, ignorando que si bien muchos vieron en ello la posibilidad de paz, otros más jóvenes no vieron satisfechas ni contempladas sus aspiraciones políticas. Siempre execrables, los asesinatos y el terrorismo de Estado continuaron, lo que no impidió que González, Aznar, Zapatero etc., intentasen finiquitar el negado conflicto, laureándose o ganando votos. Fracasados los intentos, negar el conflicto ha sido y es una obsesión, al igual que fomentar entre los jóvenes el olvido de un pasado real que, como ETA, tiene responsables y testigos mudos, que henchidos de razones y utilizando las víctimas de ariete, pretenden para mas gloria de España, que pidan perdón únicamente los otros, los malos. ¡Cuánta avestruz por el mundo!