Tras muchas maniobras, más que nunca orquestadas en la oscuridad, parece que por fin, se empiezan a mover aquel o aquellos a los que se encomendó la tarea de formar gobierno, eso sí, con la habitual soberbia y parsimonia que les caracteriza. Nosotros o el caos, nos anuncian utilizando miserablemente el fantasma de unas nuevas elecciones, nada menos que previstas para el día de Navidad que andaremos imbuidos por el espíritu navideño (entre turrones y buenos deseos) haber si así se nos olvida ya tanta majadería. Puesta ya pues la fecha, en la que se empezarían a despejar nuestras dudas (¿jefe de gobierno, sí o no?) o bien de una vez por todas, las llamadas fuerzas de izquierdas se merecen ese nombre y construyen una verdadera alternativa, que nos dé un poco de esperanza y fe en el futuro (para la inmensa mayoría cada día más negro e incierto). Les dejaré una frase de las mas duras y reales que he oído: “Si hay un idiota en el poder, es porque quienes lo eligieron están bien representados”. Ahora echen un vistazo por su alrededor y piensen como están de bien representados.
