Va a llegar el momento en que políticos paguen por ser políticos. O que solo los ricos puedan ser políticos.
Desde luego, yo con 2.813 euros de sueldo, más 1.823 euros de ayuda para abonar un piso en Madrid, más 3.000 euros al año para taxis -cuando de Atocha al Congreso se llega en metro ya mismo-, más otras dietas que no menciono porque seguro que no me las sé todas y algunas que sí sé me da vergüenza reproducir, viviría muy pero que muy a gusto en la capital del reino. Vamos, que me compraría un apartamento en Madrid centro. Y comería de menú todos los días. Menudos menús hay en la capital. Ya le digo yo dónde. Y a muy buen precio.
61.258 euros al año, sin contar 3.000 euros de taxis y demás dietas viajeras... ¡madre mía! Yo asín, sí trabajo. ¡Qué poco me iban a ver en provincias mirando en los contenedores!