NO será por no decirlo una y otra vez. Ni por luchar por que no nos acostumbremos a que el horror que sucede a nuestro alrededor (a uno o mil kilometros) pase a ser normal. Lo que está sucediendo en la Franja de Gaza es un genocidio permitido por la comunidad internacional. Ahora, la sospecha se pone sobre trabajadores palestinos de la ONU que, dice Israel, estuvieron supuestamente implicados en el ataque de Hamás. La Historia dirimirá si eso es verdad o no. De momento, lo que parece es que Netanyahu se ha buscado una nueva excusa para seguir con el exterminio de los gazatíes. Con ayuda del resto.