Ataque de cuernos
LA reacción de EH Bildu al anuncio por sorpresa de Unidos Podemos de que con su abstención permitirá el incremento de la RGI y la subida de sueldo de los funcionarios se parece mucho a un ataque de cuernos. Y de nervios. Lander Martínez fue listo al tomar la iniciativa y adelantarse a la formación abertzale, pillada en fuera de juego. Luego, la textualidad de la respuesta de Iker Casanova desveló la verdad de su estrategia -por así decirlo-: su intención no era otra que presionar al Gobierno vasco en busca de “mayores mejoras”. Los celos son muy malos consejeros.