Encuestas telefónicas
Como otras tendencias de marketing que vienen de los Estados Unidos, las empresas han decidido en los últimos años hacernos encuestas para valorar el servicio que nos han ofrecido y de esta manera posicionarse como empresas sobresalientes, pero lo que hacen es sesgar las encuestas en su beneficio. Primero, insisten que las únicas puntuaciones que valen son 9 o 10, cuando el abanico es mucho mayor, pero además utilizan otra más engañosa que es evitar encuestas a aquellos clientes que saben de antemano que les van a puntuar mal. El mes pasado el motor de mi coche japonés se rompió después de nueve años, una avería que está pasando de manera habitual en muchas motores de esta marca, por lo que debería cubrir la garantía general por defecto de fabricación, pero la empresa no se hizo cargo a pesar de publicitarse como marca con mejor fiabilidad mundial. Tras la reparación, ningún servicio telefónico se puso en contacto conmigo para valorar el trabajo realizado, cuando habitualmente me llaman cuando hago los servicios de mantenimiento de kilometraje u otro tipo de pequeñas reparaciones. Evitaron de esta manera que recibieran puntos muy bajos. Aunque las empresas nos vendan que esta valoración es para mejorar el servicio, no nos dejemos engañar, únicamente es para reflejar en sus informes o publicidad corporativa que la nota de sus clientes es un sobresaliente. ¿Pensamos realmente que los servicios que nos dan las empresas están por encima del 8,5 que es lo que vemos habitualmente en sus publicidades? ¿Merece la pena perder el tiempo realizando estas encuestas?