Vergüenza ajena

Todo lo que estamos viendo en la televisión, oído en la radio y leído en la prensa, está dando vergüenza ajena. Si yo fuese español, estaría escondido debajo de la cama sin salir hasta el 5 o el 10 o el “muchos” de octubre. ¡Qué es eso de tantas detenciones a políticos!, ¡cómo tratar de solucionar un problema político con cárcel!, ¿estamos volviendo a tiempos del franquismo? Represión, miedo, amenazas, ¿con eso se soluciona algo?

Qué triste que a unas peticiones (no un problema) que vienen de largo, se las haya hecho caso omiso. Ahora se escucha al presidente del Gobierno, a ministros del Gobierno, a ¿políticos? del Gobierno, al partido que sustenta al Gobierno, que ellos están dispuestos a hablar, que las cosas se solucionan hablando, que a partir del día 2 de octubre estarán dispuestos a hablar ¿Y hasta ahora? ¿Cuándo han estado dispuestos a hablar?

No voy a entrar a juzgar las actuaciones del gobierno catalán, pero el primero que debe de dar ejemplo de justicia, el primero que debe implantar justicia, el primero que debe de dar ejemplo de diálogo, el primero que debe rechazar las injusticias, es el Gobierno de la nación, y ustedes no lo han hecho con el tema catalán.

Señor Rajoy, tampoco es la primera vez, que digo que “usted está tranquilamente sentado en la puerta de su casa, para ver pasar por delante el cadáver de su enemigo”. Los problemas, no se solucionan esperando a que ellos solos se solucionen, los problemas hay que tratarlos cuando vienen y no esperar a que se enquisten que eso lo hacen ustedes muy bien, esperar a que se solucionen solos o a que se enquisten.