El constitucionalismo español afincado en el recodo occidental vasco nunca ha encontrado su sitio en Euskal Herria y así nos lo hace saber cada vez que sale a la palestra este títere del unionismo con sus confabulaciones frustradas por la gaviota carroñera que le aupó a Ajuria Enea.

Con la inteligencia de un botijo, califica de verde en experiencia a la candidata a la Lehendakaritza por EH Bildu y achaca al PNV los planteamientos de siempre y arrogancia nacionalista, todo esto con una altanería que contrasta con esa imagen que nos ha querido vender desde que el 23 de marzo de 2002 fuese elegido secretario general de la sucursal unionista del PSOE en la Comunidad Autónoma Vasca.

Esa imagen de escaparate en rebajas suponía (nada más que eso) la ruptura de ese matrimonio de conveniencia que mantiene el idilio españolista de siempre en tierra vasca, pero este y la trama maquiavélica o legalidad a la española, fue precisamente el as en la manga que ganó la partida para hacerse llamar lehendakari, puesto que a serlo nunca ha llegado este hombre de la chaqueta de pana en elecciones.

Los sueños de ganar unos comicios de este señor de la margen izquierda le hicieron caer sonámbulo y discursear por esta tierra con argumentillos vasquistas mientras escondía la mano con la que ha ido hasta ahora del PP, y precisamente se definía como la alternativa a Nicolás Redondo Terreros y, utilizando palabras textuales suyas, "no se definen como los acompañantes útiles del PP". Vaya con la opción de alternar.

Este defensor del constitucionalismo español, o en una palabra, de España, criticaba el enlace redondo de Nicolás con Jaime y ya comprobamos la envidia que le suscitó y allí, palabras suyas, en "el mismo lado de las trincheras que comparten", surgió el amor por el poder corrupto.

Has pasado de ser un supuesto peligroso nacionalista vasco para tus compañeros del PSOE a ser el peligro del nacionalismo español contra el Pueblo Vasco, y lo digo así, abiertamente como tú lo haces, señor López, embajador español por antonomasia.

Utilizo eso que en esta tierra está muy limitado que es la libertad de expresión, o la libertad a secas, y la ejerzo de esta manera. Viéndole y más, escuchándole, usted mismo se ha autodefinido como arrogante y ya sin el sustentáculo del PP, no pintas nada, nunca lo has hecho, eres el fracaso del unionismo español reacio a abandonar el lugar que ningún pueblo, ningunas elecciones, nadie salvo la mentira y el engaño, te han ofrecido.