En estos momentos la economía española está totalmente desequilibrada puesto que ni el propio gobierno sabe ya la cantidad que debemos o la que vamos a necesitar para salir a flote si es que se consigue, aunque el Gobierno sigue diciendo que no necesitamos ayuda y que el rescate es única y exclusivamente para la Banca.

Las entidades financieras han sido en su mayor parte las causantes de esta bancarrota bancaria. Si a ellas va dirigida la ayuda económica de Europa pues yo me pregunto; el porqué de esta situación la tenemos que pagar los ciudadanos de a pie, ya que nosotros no hemos ni malgastado, ni despilfarrado, ni nos hemos puesto pensiones millonarias, ni hemos contratado planes de pensiones, a cuenta de las sociedades en las que trabajábamos, ni hemos cogido ni un duro de los bancos, etc. La solución es sencilla: que los causantes o las entidades financieras de esta situación corran con el riesgo de crédito que se les da y caso contrario si no pueden pagarlo que no lo reciban y si es que tiene que caer alguna entidad financiera, pues que caiga.

La deuda seguirá aumentando sin ninguna clase de control y, a la postre, las medidas drásticas que anuncia el PP serán noticia diaria hasta que nos pongamos a la altura de algún país tercermundista; posiblemente bajarán las pensiones si es que a don Mariano no se le ocurre otra idea más genial, "cosas veredes que nunca creyeres" (frase de don Quijote a Sancho Panza).

El PP parece ser que aparte de una serie de medidas que van a estrangular por completo el poder adquisitivo de los españoles elimina la deducción por compra de vivienda; desconozco qué economista le ha dado tal iluminada idea, ya que de esta forma la construcción terminará por estancarse de por vida, el paro subirá alocadamente y las ayudas por rehabilitación desaparecerán quedando nuestro país vecino e inclusive nuestra Comunidad en una situación muy difícil de recuperar.

El señor López, que parece vivir en otra galaxia y previendo que las autonómicas están a la vuelta de la esquina, decide alargar su mandato y empieza a enredar con los presupuestos de 2013, tema que no debía de tocar, ya que con toda seguridad se puede decir que dejará de ser el garante que decía iba a ser del Gobierno vasco.

Nuevos aires de tipo nacionalista y con sobrada experiencia demostrada durante décadas están llamando a la puerta de cada votante.