El Ministerio de Educación ha echado por tierra las ilusiones de muchos licenciados con ganas de acogerse a la beca de auxiliares de conversación en el exterior. En mi caso personal, la mala gestión y el penoso servicio de atención al becario del Ministerio de Educación han impedido que pueda disfrutar de una increíble oportunidad para mi currículum personal, laboral y académico.
A principios de abril, una primera lista provisional de admitidos me excluyó de la beca por no haber presentado una certificación académica válida. Teníamos diez días para volver a enviar la documentación correcta o solucionar los problemas que cada uno de los candidatos tuvieran. Diez días después, el ministerio ya tenía mi documentación válida, puesto que recibí el justificante de entrega de mi carta certificada.
Sin embargo, desde entonces empezó una pesadilla que tres meses después me ha dejado en tierra por incompetencia del departamento responsable. Un sinfín de correos electrónicos sin respuesta, minutos y minutos de llamadas a tres teléfonos distintos sonando y sonando, cartas tiradas a la basura y una visita presencial al Ministerio en Madrid (aunque resido en Donostia) en la que me remitieron a la web? Todo este calvario de dos meses no ha servido de nada, pues a día de hoy, con la resolución final definitiva publicada en la web, mi beca ha sido denegada por la misma causa que fue subsanada hace ya dos meses y medio. ¿Es lógico que el ministerio no responda a mis peticiones? ¿Es justo que me quede sin esta beca que me corresponde por su mala gestión?
