El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, reconoció ayer por primera vez que Israel estuvo detrás de los ataques con buscapersonas y walkie-talkies de septiembre en Líbano, y que dejaron al menos 40 muertos y más de 3.500 heridos. El mandatario confirmó la autoría israelí y recordó también su responsabilidad en la muerte del líder de Hizbulá, Hasán Nasralá, en un comentario concebido como una crítica velada al cesado ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant.
“La operación con buscapersonas y la eliminación del líder de Hizbulá, Hasán Nasralá se llevaron a cabo a pesar de la oposición de altos funcionarios del estamento de Defensa y sus responsables de ellas en el escalafón político”, según recogía el diario Times of Israel.
Si bien las explosiones del 17 y 18 de septiembre fueron atribuidas en un principio a un ataque informático, funcionarios estadounidenses confirmaron al The New York Times que la Inteligencia israelí había logrado ocultar material explosivo dentro de un nuevo lote de unos 3.000 buscas importados a Líbano.
A estos aparatos se les introdujo material explosivo de entre 30 y 60 gramos junto a la batería de cada busca y un sistema que podía activarse de forma remota para la detonación a su llegada a territorio libanés, tras lo que Hizbulá los distribuyó entre sus miembros en Líbano, Siria e incluso Irán.
Más de 50 muertos en 24 horas
Al menos 53 personas murieron, más de la mitad de ellos en el sur del Líbano, y 99 resultaron heridas en las últimas 24 horas por los ataques israelíes contra el país mediterráneo, informó ayer el Ministerio de Salud Pública libanés.
En una publicación en su cuenta oficial de X, el ministerio señaló que 28 personas perdieron la vida en el sur del país, sobre todo contra la región de Tiro, mientras que 17 murieron en la región de Baalbek, en el este del país.
Hizbolá, por su parte, reivindicó varios ataques durante las últimas horas en el norte de Israel. El primero ocurrió sobre las 09.15 horas en Kiryat Shmona y dos horas después contra un cuartel militar israelí en Shraga. Más tarde, sobre las 10.30 horas, atacó “una concentración de fuerzas enemigas armadas con un escuadrón de drones de ataque” en la localidad israelí de Avivim, junto a la localidad libanesa de Marun el Ras (Bint Jbeil), según un comunicado de la milicia libanesa.
En total, desde el mes de octubre de 2023, han muerto 3.189 personas, entre ellas 194 menores y 621 mujeres, según el departamento, aunque la gran mayoría de las víctimas se han producido desde el inicio de la escalada israelí contra el Líbano a finales del pasado septiembre.
Los heridos en más de un año de conflicto ya han superado las 14.000 personas, entre las que se encuentran más de 1.200 menores de edad, de acuerdo al ministerio.
Además de la cifra de víctimas, alrededor de 1,2 millones de personas se han visto forzadas a abandonar sus hogares por los bombardeos y la invasión terrestre israelí, iniciada el mes pasado.
Túnel de Hizbulá
El Ejército de Israel localizó y selló la semana pasada un túnel, a alrededor de un kilómetro y medio de la frontera, con una boca de salida que conducía a un cementerio en el sur del Líbano, detalló un comunicado castrense.
La unidad de élite Shaldag de la Fuerza Aérea israelí y las fuerzas terrestres de la División 36 allanaron la instalación subterránea, “de aproximadamente un kilómetro de largo, unos dos metros de altura y ubicada a cerca de un kilómetro y medio de la frontera”. Según el Ejército, en ella encontraron salas de comando, dormitorios y escondites con numerosas armas.
Ámsterdam
Decenas de detenidos. Activistas propalestinos fueron detenidos ayer durante una manifestación prohibida en la plaza Dam en Ámsterdam, según informó la televisión pública neerlandesa NOS. La ciudad prorrogó además la prohibición de manifestaciones hasta el jueves por la mañana después de estas decenas de detenciones, que el medio local ‘Het Parool’ cifró, incluso, en un centenar. La marcha, que estaba prevista a las 14.00h, fue prohibida como parte de una ordenanza de emergencia que se extiende a toda la capital.