Tras 186 días de guerra y más de 33.300 gazatíes muertos, el cese de las hostilidades en la Franja de Gaza sigue sin producirse pese a algún acercamiento, al tiempo que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, redobla sus amenazas de una invasión terrestre en el área sureña de Rafah. La organización islamista Hamás anunció ayer en un comunicado oficial que la última propuesta israelí, mediada el domingo en El Cairo, no atiende sus principales demandas, que siguen siendo un alto al fuego definitivo, la retirada total de las tropas israelíes de Gaza y el regreso de los desplazados al norte de la Franja.

“La postura de Israel sigue siendo obstinada y no ha respondido a ninguna de las demandas de nuestro pueblo y nuestra resistencia”, menoscabó el grupo, que sin embargo, indicó que estudiará la propuesta. En este sentido, anoche se reunió tanto el Gabinete de Guerra, compuesto por Netanyahu, el ministro de Defensa Yoav Gallant y el ministro Benny Gantz, como el más amplio Gabinete de Seguridad para debatir la liberación de los 133 rehenes y las últimas negociaciones, que se espera se reanuden en El Cairo.

Mientras esto sucedía, decenas de manifestantes, incluidos familiares de cautivos retenidos en Gaza, se congregaron en la plaza Yigal Shiloh en Jerusalén, a las afueras de la reunión de gabinete, a fin de presionar al gobierno para que llegue a un acuerdo. “132 noches que imagino la imagen de mi marido, Ohad, antes de irme a dormir, y no puedo cerrar los ojos porque tengo miedo de ver la expresión de sufrimiento en su rostro y saber que no tengo forma de ayudarlo”, dijo Raz Ben, una de la rehenes liberada tras 54 días en Gaza.

Según reveló ayer el periódico estadounidense The Wall Street Journal, la última propuesta mediada por EE.UU. contempla el regreso de 150.000 palestinos al norte de Gaza, un incremento significativo en comparación a los 60.000 barajados hasta ahora por Israel. Además, Israel pedía que la primera fase de la tregua acarrease la liberación de 40 rehenes en la categoría humanitaria, esto es niños, mujeres y ancianos, pero según informó el diario local Walla News, Hamás habría asegurado no tener a tantos cautivos vivos que cumplen esas características; lo que podría ser compensado con la liberación de soldados y rehenes varones.

Sin embargo, dentro de la Franja aumenta el miedo entre la población de una posible invasión terrestre en Rafah en las próximas semanas o meses, sobre todo, tras la retirada el domingo de las todas las tropas de Jan Yunis y la supuesta compra por Israel de unas 40.000 tiendas de campaña para alojar a los ya desplazados, una vez sean obligados de nuevo a abandonar Rafah.

El Ministerio de Defensa israelí publicó el lunes una licitación para un proveedor de 40.000 tiendas de campaña, según reveló el Times of Israel, que formarían parte de los preparativos para la toma militar de Rafah, confirmó un funcionario israelí al diario bajo anonimato. Esas tiendas no podrían albergar ni a 500.000 personas.

Netanyahu insiste en Rafah Por su parte, Netanyahu anunció, por primera vez, tener “una fecha” prevista, que no reveló y EE.UU. dice desconocer, para la invasión de Rafah; donde dice que quedan activos cuatro batallones de Hamás que impiden la “victoria absoluta” sobre la organización islamista y la aspiración de que no constituya nunca más una “amenaza” para Israel.

“Completaremos la eliminación de los batallones de Hamás, incluso en Rafah. No hay fuerza en el mundo que pueda detenernos”, insistió ayer el líder hebreo durante su visita a la base militar de Tel Hashomer, en el centro del país, reunido con nuevos reclutas en puestos de combate y de vigilancia. La comunidad internacional y los organismos de derechos humanos llevan meses urgiendo a Netanyahu que no invada Rafah, ya que podría desencadenar una masacre entre la población civil en uno de los puntos más superpoblados y vulnerables del planeta. 

En corto

Ataques 7-O. El Ejército israelí confirmó ayer la muerte de uno de los terroristas que participó en los ataques de Hamás del 7 de octubre en un bombardeo en Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza, aunque no ofreció más detalles. En un comunicado castrense, las autoridades informaron de que las fuerzas israelíes continúan operando en el centro de la Franja, donde los soldados “eliminaron a varios terroristas en combates a corta distancia”. 

Bombardeo en Siria. El Ejército de Israel bombardeó ayer “infraestructuras militares” del Ejército de Siria en la provincia de Daraaen respuesta a un ataque desde territorio sirio contra los ocupados Altos del Golán, incidente que se saldó sin víctimas. “Durante la noche, aviones atacaron infraestructuras militares del Ejército sirio en el área de Mahaja. Además, las Fuerzas de Defensa de Israel atacaron con artillería una posición del Ejército sirio en el sur del país”, señaló la nota.