El Departamento de Justicia estadounidense demandó este jueves a la empresa aeroespacial SpaceX, propiedad de Elon Musk, por discriminar a refugiados y asilados en su proceso de contratación.

El pleito alega que, desde al menos septiembre de 2018 hasta mayo de 2022, SpaceX desalentaba a esas personas la solicitud de un empleo y se negó a contratarlos o a tenerlos en consideración debido a su estatus de ciudadanía, algo contrario a la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA, por sus siglas en inglés).

En sus anuncios y declaraciones públicas, SpaceX mantenía erróneamente que, según las "leyes de control de la exportación", solo podía contratar a ciudadanos y residentes permanentes legales de EE.UU., titulares de una "green card".

El Departamento de Justicia subrayó en su comunicado que dichos reglamentos federales no imponen tales restricciones a la contratación.

"Más aún, el permiso de los asilados y refugiados de vivir y trabajar en Estados Unidos no vence, y en virtud de las leyes de control de la exportación, están en condiciones de igualdad con ciudadanos y residentes permanente legales", añadió esa nota.

El Departamento de Justicia destacó que los asilados y refugiados han superado muchos desafíos en sus vidas y que la discriminación ilícita en el empleo, debido a su estatus de ciudadanía, "no debería ser uno de ellos".

"A través de este pleito haremos que SpaceX rinda cuentas por sus prácticas ilegales y buscaremos un remedio que permita a los asilados y refugiados competir de manera justa por las oportunidades de trabajo", dijeron las autoridades judiciales estadounidenses.